Por: Adolfo Ramírez del Aguila
Docente de aula.
Érase una vez, en la escuela, había un curso llamado Economía Política. Eran tiempos de pedagogías conductistas y métodos tradicionales; los alumnos entendíamos con mayor lucidez, de lo que pasaba en la realidad. Hoy, con métodos más innovadores y estrategias más actualizadas, nuestros alumnos no comprenden lo que leen, no entienden lo que escuchan, ni analizan lo que observan a su alrededor. Eso sucede por ejemplo, con la comprensión escolar del asunto del lote petrolero 192 y la encrucijada política que ha remecido al país entero.
Mis alumnos por ejemplo, solo quieren saber si va a haber paro o no. Los motivos, los análisis, las perspectivas del asunto, simplemente poco o nada les interesan. Y mejor ni comentar, de la actitud similar de algunos de mis colegas. Las causas de este desinterés por la economía política actual, lo podríamos ver desde diversos ángulos; pero, veámoslo desde el lado del docente: ¿Por qué no escolarizamos estos problemas? ¿Confusión de enfoques? ¿Falta de diversificación de nuestros contenidos? ¿Pobre actualización y desmotivación por los bajos salarios? ¿Falta de manejo de información especializada? Podrían ser todas.
Veamos el desinterés por lo que pasa en nuestra realidad, desde la perspectiva del alumno: ¿Dificultades para procesar la información? ¿Aburrimiento del acontecer político? ¿Bloqueo mental ante la complejidad de los temas económicos? ¿Preferir “Esto es Guerra” para evadirse de la realidad y no complicarse la vida con tantos problemas? No lo descartamos como causas.
Y podríamos indagar las perspectivas del desarraigo de la realidad, desde el papel de los medios de comunicación, los actores políticos, las organizaciones, en fin. Cada estamento aporta para que actualmente nuestros estudiantes muestren poco interés por la cosa pública. Una sola pregunta: Si los niños y adolescentes que ahora están en nuestras escuelas son los futuros actores sociales y políticos de nuestro país ¿qué nos depara el porvenir con este tipo de ciudadanos? Hay honrosas excepciones, naturalmente. Conozco estudiantes de secundaria que están atentos a su realidad y se cuestionan sobre su compromiso social.
A ver. Estamos frente a un alumno loretano de alto rendimiento, el alumno ideal que quiere el actual ministro de Educación. Primera pregunta de cajón: ¿Por qué el pueblo de Loreto está protestando actualmente en las calles? Contesta el alumno: “Por el Lote 192”. Buena respuesta. Pregunta dos: ¿Qué está pasando con el Lote 192 para que sea objeto de protestas? Responde: “La Pluspetrol dejó de operar en ese lote y el gobierno después de una licitación fallida ha concesionado directamente a otra empresa transnacional para que el lote, la más grande productora nacional del crudo, no se detenga”. Buena respuesta.
Pregunta tres: pero, entonces ¿Por qué el pueblo de Loreto se opone a esta adjudicación directa de este Lote? Responde: “Porque los peruanos tenemos una empresa, Petroperú, que lo podría hacer, y sin embargo el Gobierno de Ollanta, del Partido Nacionalista, lo quiere entregar al capital extranjero, vaya gobierno nacionalista que tenemos”. Muy analítica tu respuesta. Cuarta pregunta: Pero ¿Está Petroperú en la capacidad empresarial de administrar ese Lote? Responde: “Claro que sí, actualmente estamos administrando exitosamente la Refinería de Talara, incluso nuestra empresa nacional se proyecta a explotar pozos petroleros en el vecino país del Ecuador; solo que este actual gobierno nacional está de salida y no quiere invertir en el negocio, da la impresión que solo le interesa su tajada tributaria de esta entrega vergonzosa, para financiar sus programas sociales como Pensión 65, Beca 18, etc. y no está proyectándose en el mediano y largo plazo.
Bien alumno, una última pregunta: ¿Apoyas o rechazas esta lucha del pueblo de Loreto? Responde: “Claro que sí, Loreto la conciencia rebelde de la Patria, ha demostrado a lo largo de su historia, su lucha permanente en la defensa de la soberanía territorial, y en el caso del Lote 192, la soberanía energética, para que nuestros pueblos indígenas y los pueblos mestizos, por fin estemos en la agenda nacional y sean escuchadas nuestras propuestas de respeto a los ecosistemas, el aprovechamiento racional de los recursos, la diversificación de nuestra economía regional, para no depender solo del petróleo que pronto se va a acabar… ¿Continúo profesor?” Suficiente alumno, tienes 20 de nota.
Hemos querido hacer este ejercicio, recordando el método de los primeros profesionales de la educación: los sofistas y Sócrates, personajes de la filosofía griega de hace más de 2,500 años. Se dice que Sócrates interrogaba a sus interlocutores para indagar sus nuevas ideas. Se cuenta que este método lo aprendió, viendo a su madre que ayudaba a las mujeres a hacer parir a sus hijos.
Finalmente, sería interesante y lanzo el reto, para que en nuestras escuelas loretanas y por qué no del Perú, se hable del Lote 192. No es posible que nuestros alumnos solo estén pensando en cómo divertirse durante los paros y no estemos aprovechando la coyuntura para aprender en las aulas de la vida. Una educación que da espaldas a la realidad, es una educación alienante, así le revistamos con innovaciones constructivistas o toques neuro-científicas. El gran rusoVigotsky, sigue vigente aún. Amén.
Excelente artículo Reverendo Adolfo. Tienes mucha razón en que los estudiantes no sientes esas ganas de querer estudiar. ¿Qué ha pasado? ¿En qué estamos fallando? Los últimos estudios referidos a los factores que influyen en el aprendizaje de los estudiantes concluyen que el factor más importante es el desempeño docente y el liderazgo pedagógico del director. Es decir podrá estar mal pagado el docentes, la escuela no tiene la infraestructura adecuada, los currículos pueden conductistas, etc, etc, pero si el docente está actualizado, si tiene en cuenta el contexto, la realidad inmediata, ese estudiante va a interesarse porque ese aprendizaje le va a servir fuera de las aulas, le va a servir para la vida. La mayoría de docentes no hemos aprendido a diversificar y lo que hacemos es copiar las unidades y sesiones de aprendizaje que PERUEDUCA cuelga en su portal y eso desarrollamos con los jóvenes. Te reto a que hagas una encuesta a tus profesores y cuantos de tu institución han incorporado la problemática que hoy vivimos en Loreto en sus sesiones de aprendizaje, te aseguro no son ni cinco profesores. Los directivos tienen que asumir también su responsabilidad. Éxitos, colega.