Se encuentra a una hora de la ciudad de Iquitos, en el tramo del km 58 de la carretera Iquitos a Nauta, exactamente pasando el centro poblado Cahuide que se ubica al finalizar el puente Itaya, para luego ingresar por la margen izquierda; recorremos 9 km y nos encontramos con el pueblo San Joaquín de Omaguas, donde a primera vista nos deslumbra los ojos la impresionante vista panorámica del paisaje, el cauce y majestuosidad del río Amazonas junto al verdor del bosque que motiva a realizar diferentes tomas fotográficas de dispersos lados.
Este pueblo tiene un gran potencial turístico como muchos pueblos de nuestra amazonia. Se puede degustar los mejores potajes de la gastronomía amazónica en la patarashca, timbuche, chilicano, pango, buetén, chupishpa, guisos, picadillos y mazamorras que son preparados por las señoras lugareñas que nos reciben con una sonrisa y amabilidad; a pocos metros se ubica una maloka donde un reconocido curandero practica el esoterismo realizando baños de florecimiento con plantas que se siembran en las chacras del lugar, como son la mucura (petiveria aliácea) y el ajo sacha (chelycarpus ulei). En la zona oeste del pueblo se encuentra una pequeña laguna llamada Omagua donde se puede zambullir en sus aguas frías y tranquilas.
Hemos encontrado dos componentes culturales que hacen atractivo e interesante a este pueblo: la lengua originaria y su historia; los lugareños practican la lengua omagua que es una lengua milenaria que por el paso de generaciones ha sido transmitida y revalorada por ellos mismos, fortaleciendo su identidad y sintiéndose orgullosos de sus raíces, esto se puede observar en las señaléticas de los caminos angostos o en las puertas de las casas y en la enseñanza que están impartiendo los profesores en el colegio inicial, primario y secundario. Son muchos los pueblos amazónicos que cuentan con un valor histórico que aún nos falta conocer. Este pueblo fue fundado hacia el año 1687 (siglo XVII) por los misioneros jesuitas en una isla del Amazonas, aproximadamente frente al río Ampiyacu, siendo el Padre Samuel Fritz su fundador y el año 1726 el Padre Zurmillen lo trasladó al lugar actual, inicialmente fue poblado por indios Omaguas pero se le unieron indios de otras naciones, tales como Yurimaguas, Mayorunas, Yameos de diversas parcialidades, y algunas Cocamas y Cocamillas. En medio de este pueblo se encuentra la iglesia que guarda celosamente algunos de los tesoros culturales más grandes de la amazonia peruana: una campana de bronce, un crucifijo de madera y la imagen tallada de San Joaquín de Omaguas que vienen a representar el vestigio del paso de la labor evangelizadora y estoica de los padres jesuitas en nuestro territorio a cargo del Padre Samuel Fritz, quien fue el primer gran defensor de los nativos y los territorios amazónicos hispano peruano frente a los “bandeirantes” luso-brasileños además elaboró el primer mapa geográfico del río Amazonas, que aún hoy causa asombro y que durante siglos sirvió como guía para otros navegantes y exploradores como: Charles La Condamine, Paul Marcoy, Antonio Raymondi entre otros personajes que navegaron estas aguas. El Dr. Aristóteles Álvarez López realizó un excelente trabajo de investigación de esta parte del territorio peruano, de la vida y obra de Samuel Fritz que lo transcribió en su libro “En Busca de la Memoria Pérdida” un material imperdible para leer, entender y comprender nuestros orígenes amazónicos aunque también debería denominarse esta obra: En busca de la memoria olvidada, sobre todo por todos los gobernantes de turno.
En la actualidad, su autoridad principal el alcalde Willy García, viene uniendo esfuerzos junto a la Cámara Regional de Turismo de Loreto y la agrupación Iquitos Cultural en promover y desarrollar el turismo del lugar, para ello se inició un taller de capacitación en Gestión Gastronómica para las señoras vivanderas que harán una pasantía por las cocinas de los principales restaurantes de la ciudad de Iquitos, los jóvenes que cursan los últimos grados de instrucción secundaria recibirán un curso en Gestión Hotelera y Turística para formar orientadores turísticos con manejo de idioma inglés. Los pobladores son conscientes del potencial turístico de la zona y que dentro de poco se puede convertir en un “hub” económico porque existen las condiciones para construir un embarcadero o puerto fluvial que nos conectaría con Yurimaguas, ya que cuenta con una ubicación estratégica, carretera, buen calado y una ribera estable.
