Verano como pocos

Hace como unas cuatro décadas que cuando el centro de Iquitos se afectaba con el corte de agua potable desde la planta de tratamiento, en el centro de Iquitos que era por donde desarrollaba nuestra niñez, era todo un caso para buscar agua y poder almacenar para el aseo y para la preparación de los alimentos.
Entonces todo un grupo de personas entre adultos, niños y adolescentes, salíamos a las calles a buscar el llamado “líquido elemento”, donde las señoritas adultas solteras que tenían pozos en su huerta y eran generosas para permitirnos sacar hasta cierto nivel, antes que se quedara muy bajo el agua del subsuelo.
Había otro pozo de la casa de un ciudadano judío – peruano que, aunque renegando y en tono rabioso abría sus puertas para regalarnos unos cuantos baldes de agua, también había algunas vecinas que tenían pozo alto de concreto donde se juntaba el agua de la lluvia y por tanto había reserva y facilitaba algunas olladas del preciado líquido.
En la actualidad aquella forma de pozos redondos y profundos ya no existen en las casas de Iquitos, por lo menos no es común, lo que sí hay son los pozos tipo piscina para almacenar agua potable, para bombear a otro ubicado en altura para distribuir luego a la casa, pero si se corta el servicio del agua potable también se secan obviamente, y otro jalan el líquido directo del subsuelo con sistema de tubería.
En todos los casos si se corta el servicio de forma prolongada no tendremos agua para uso doméstico. Por lo que, por esta posibilidad y otras razones tenemos que aprender a racionalizar el uso del agua y no desperdiciarlo. Y es que el año pasado tuvimos un verano prolongado y todo hace indicar que este año será más prolongado y con una vaciante más pronunciada, similar a lo ocurrido hace unos 25 años, como lo ha alertado el Senamhi.
Es importante tenerlo en cuenta, porque se trataría de uno de los fenómenos naturales que cada cierta temporada ocurre en nuestra zona tropical, por lo que la empresa que da el servicio de agua, tendrá dificultades para bobear el líquido desde el río Nanay, porque se aleja de la planta de captación. Esperamos que haya un plan de contingencia que ayude a aminorar la escasez.