Revisando la historia de los intentos de intercambios inter continentales, encontramos que en la Edad Media el gran intercambio sucedió en el Mediterráneo, en el Siglo XX, ese intercambio sucedió con la potencia de la gran industria procedente del Atlántico, téngase en cuenta que, en este intercambio del último siglo, fue el Canal de Panamá la «niña bonita» que bien se portó, todo el siglo.
Ahora ya en el siglo XXI, este Canal panameño ya amenaza quedar corto para la grandeza que será este gran flujo del intercambio Asia-Atlántico, pues todo hace prever la cercanía de esta metamorfosis, del nuevo ritmo y volumen del intercambio universal
Hay que tener en cuenta que Colombia ha proyectado ya otra vía canalera Atlántico-Pacífico, este Canal sucederá mediante el río Atrato el mismo que será represado inundando gran área de selvas para que trasatlánticos desde el Golfo de Urabá ingresen hacía el Océano Pacífico.
Bolivia también ya preparó la vía carretera desde Brasil al puerto de Ilo en Perú, inaugurado en los años noventa, a esta carretera se suma el Perú con la vía carretera Interoceánica, todo este futuro flujo esta muy bien, pero, es Perú el gran ausente con una vía de flete económico viable, el gran ausente con la vía bimodal Fluvial-terrestre, desde Iquitos a Bayóvar y en Ferrocarril siguiendo la vía del oleoducto trasandino. Desde Belén do Pará Manaus, vía fluvial, hasta Iquitos. Diremos, desde los años ochenta venimos tratando esta necesidad, que, actualmente con el tino del caso, podría ser realidad.
Loreto para salir de su enclaustramiento e ir para adelante, necesita un flete barato y no una Carretera barata. No necesitamos una carretera barata, necesitamos un Ferrocarril de flete barato, caso contrario no podremos pagar el flete de costo mayor, ya que para pagar el mayor costo o se bajarían los salarios o se deja de vender.
Quiere decir también que los salarios podrían ser mejores y podrán trabajar más loretanos, todos los días preparando carga para un ferrocarril por día, hay que contar que los vapores de Brasil llegarán al muelle de Iquitos, para descargar todo el día de todos los días. Que más podemos sumar, claro, cuando hay trabajo, la gente consume porque tiene con que comprar, esto quiere decir que los negocios florecerán, ahora no necesitaremos ser víctimas de la extorsión de los políticos que con el cuento de la desgravación impositiva nos tienen de cholitos.