- Defensa del territorio ancestral duró 117 días por pueblos de las cinco cuencas.
- También conmemoran a quien en vida fue un ejemplar líder Jairo Sandi Mayanchi.
Con la esperanza que el Estado podría entrar en un diálogo intercultural político, centenares de indígenas de los pueblos de cinco cuencas amazónicas de la jurisdicción de Loreto, iniciaron una dura lucha que se prolongó por 117 días. Así quedará registrado en la historia que fue el 1 de setiembre del 2016 que se inició el proceso de defensa del territorio ancestral.
La FECONAT, organización representativa e histórica del pueblo kichwa del río Tigre, junto a las federaciones y comunidades, conmemora 1 año desde el inicio de la gran unidad de los distintos pueblos indígenas de las 5 cuencas amazónicas afectadas por la actividad petrolera irresponsable en la comunidad de Saramuro-Saramurillo, río Marañón.
Es por ello que ayer conmemoraron a todos los líderes, lideresas, padres, madres, quienes acompañaron con mucha dignidad, firmeza y fortaleza este proceso, reivindicando sus derechos, con la esperanza que el Estado esta vez comparta en el marco de un diálogo intercultural político.
La conmemoración particular va para el líder ejemplar Jairo Sandi Mayanchi, quien partió al más allá tras una grave enfermedad. “Nunca olvidaremos su firmeza”, expresó el presidente de Federación de Comunidades Nativas Kukamas, César Llerena Rioja.
También en esta fecha conmemorativa expresaron su reconocimiento y agradecimiento a sus aliados, a los profesionales, a defensores de los derechos humanos, “quienes nos acompañaron y acompañan en el camino. Los alianzas nos fortalecen”.
Resumen que en Saramuro-Saramurillo, “por primera vez, se cuestionó la viabilidad de la explotación petrolera en esta parte de la Amazonía peruana, y los acuerdos firmados por el Estado los días 14 y 15 de diciembre del 2016, son acuerdos integrales muy importantes, como es el tema del estudio internacional del Oleoducto Nor Peruano y los ductos del Lote 192 y 8, la comisión de la verdad, la remediación, la revisión del contrato de Pluspetrol Norte S.A. en el lote 8, la compensación del Estado a los pueblos por 40 años que reportó beneficios a la actividad petrolera y no se ha revertido bajo forma de proyectos, entre otros”.
Explican que lo negativo es que no se están cumpliendo con los acuerdos. “Si bien se saluda los pequeños avances en el marco de la Comisión Multisectorial en lo que se está formulando un plan de inversión especial, no es suficiente. El Estado debe reconocer el derecho a la compensación por más de 40 años, así como afirmar la decisión política de invertir en nuestros pueblos para los próximos 4 años de gobierno. Existe una profunda preocupación por la falta de voluntad política, buscan cansar y dividir, y hasta es lamentable que haya dirigentes, asesores y ONGs que se prestan poniendo en peligro la reivindicación legítima de los derechos. Tal vez por falta de experiencia o conocimientos”.
(Diana LM.)