Todo sigue igual desde que llegó el presidente Humala a prometer que levantarían sus casas

Han pasado 8 meses desde que se quemaron 130 casas en calle "Blasco Núñez" en la zona baja de Belén. Todo está igual y peor.

-Hace 8 meses se quemaron 130 casas en zona baja de Belén

-Barreras burocráticas hacen que personas sigan viviendo en hacinamiento y algunos niños a la intemperie porque sus padres han decidido retornar a vivir aunque sea en tambos.

*Municipalidad de Belén, Gobierno Regional, Cofopri, Ministerio de Vivienda se «pasan la pelota».

-Sin embargo, los damnificados vienen aportando dinero para algunos papeleos.

Por: Luz Marina Herrera.

Han pasado 8 meses desde que se quemaron 130 casas en calle "Blasco Núñez" en la zona baja de Belén. Todo está igual y peor.
Han pasado 8 meses desde que se quemaron 130 casas en calle «Blasco Núñez» en la zona baja de Belén. Todo está igual y peor.

Aunque para algunos los 8 meses transcurridos desde que explotó la noticia del gigantesco incendio en la zona baja de Belén, exactamente en la calle «Blasco Núñez», poco antes de Navidad, no signifiquen mucho; para los más de 300 damnificados continuar viviendo en conteiner (ubicados en la calle Libertad) con gente que ni siquiera son familia les resulta toda una odisea diaria de la que difícilmente saldrán dentro de poco como les ofrecieron.

Al día siguiente del tremendo incendio que llamó la atención nacional, llegó a Iquitos el presidente Ollanta y su esposa Nadine para caminar y observar el panorama de las casas y pertenencias de los humildes moradores, totalmente convertidas en cenizas. Lo que les ablandó el corazón para reunirse de inmediato con el presidente regional, alcaldes y autoridades de Defensa Civil e incluso el Ejército, a fin que todos pongan el hombro y así en el menor tiempo posible les levanten cuanto antes las viviendas de los moradores.

Sin embargo, la creciente llegó y tapó la zona. Los damnificados subieron a la ciudad donde de manera absolutamente hacinada siguen subsistiendo. La creciente se fue, ha llegado la vaciante y dentro de 3 o 2 meses nuevamente vendrá la creciente y todo hace indicar que los damnificados no contarán con las casas ofrecidas. Y todo ello porque los responsables de cambiar el panorama están enfrascados en papeleos e insoportable burocracia que perjudica notablemente a las personas que antes ahí vivían.

Después de 8 meses, ya con el camino despejado hasta la zona siniestrada, el Diario «La Región» pudo llegar para comprobar in situ la dejadez, la inercia, el olvido, el «engaña muchachos» que siempre se refleja para con las personas de escasos recursos quienes solo abrigan en su ser, el confiar una vez más en que los responsables de cumplir con lo prometido, lo cumplan.

Hoy por hoy no cumplen, y no solo eso, parte de los damnificados han dado testimonio de que vienen pagando para que los papeles puedan caminar. «Estamos pagando autovalúo y solo contamos con el terreno. Dónde podemos acudir si entre ellos se tiran la pelota. El gobierno regional dice que la municipalidad de Belén es la responsable, la municipalidad dice que Cofopri y el Ministerio de Vivienda, así como la contratista que ha ganado la Buena Pro para hacer las casas, incluso a ellos se les está pagando, dicen que para una búsqueda literaria», expresaron damnificados como Adilia Dahua, Julio Fasabi y Graciela Pinedo.

También hablaron del problema socio económico generado con sus hijos. «Hemos subido a vivir en los ambientes pre fabricados de la calle Libertad pero nuestros hijos estudian en las escuelas de Belén, entonces ¿usted sabe lo que cuesta un pasaje todos los días, usted sabe lo que es caminar desde allá con un tremendo sol todos los días? Nos interrogan y nos quedamos callados. Claro que lo imaginamos pero vivirlo es otra cosa que por ahora solo ellos lo sienten y por eso se sienten abandonados y burlados por aquellos que la pasada Navidad les hicieron un sin número de promesas hoy incumplidas.

Finalmente, se pudo dialogar con César Mori, del área de fiscalización de la Municipalidad de Belén que recorría la zona el día de ayer. «Estamos recolectando datos para la inscripción del impuesto predial, para que ese documento formal lo puedan adjuntar a los requisitos que está solicitando el Ministerio de Vivienda», contó ante la mirada incrédula de los damnificados ahí presentes.

El dirigente de la zona dijo que en efecto venían cobrando una suma para la Municipalidad a fin que cada predio sea inscrito en el sistema. Esto para los que cuentan con título que son unas 88 familias ¿y qué pasará con aquellos que no lo tienen pero que ocupaban un espacio donde lo perdieron todo?

Y como todo Loreto conoce, Belén siempre estará así mientras sus hijos no elijan a gente capaz, a autoridades no solo con criterio y ganas de mejorar la calidad de vida de todos ellos, sino con un espíritu altruista de querer sinceramente que haya una transformación profunda en el distrito inmerso en extrema pobreza que no solo se ve por todo lado, sino que se palpa y se sella para siempre en la retina de las personas que visitan la zona por uno… u otro motivo.