- Comunidades indígenas denuncian impacto ambiental y exigen medidas urgentes.
Un nuevo atentado contra el Oleoducto Norperuano (ONP) se registró el miércoles 19 de marzo en el kilómetro 315 del Tramo II, cerca de la comunidad nativa Sinchi Roca, en el distrito de Manseriche, provincia de Datem del Marañón, Loreto. Este es el tercer ataque en lo que va del año, sumándose a los ocurridos en febrero en los kilómetros 385 y 376.
Producto del sabotaje, se generó un derrame de petróleo que afectó la quebrada Uyai Entsa, un afluente de la quebrada Pijuayal, lo que alarmó a los pobladores de la zona. Según reportes comunales, el incidente fue detectado alrededor de las 2 de la madrugada, cuando los habitantes percibieron un fuerte olor a hidrocarburo y notaron la presencia de crudo en el agua.
Petroperú activó su Plan de Contingencia y desplegó su operativo personal para contener el derrame. Se instalaron barreras de contención en la quebrada Pijuayal y se aplicó una grapa empernada sobre el corte realizado por terceros, logrando restablecer la operatividad del ducto. No obstante, aún se evalúan los impactos ambientales y posibles afectaciones a la población.
El Organismo de Evaluación y Fiscalización Ambiental (OEFA) inició una supervisión para determinar la causa del incidente y verificar la implementación de las medidas de mitigación. La entidad fiscalizadora informó que inspeccionará el cumplimiento del Plan de Contingencia de Petroperú, que incluye la contención del hidrocarburo y la limpieza del área afectada.
Las comunidades indígenas, representadas por la Coordinadora Regional de Pueblos Indígenas (CORPI) San Lorenzo, denunciaron que estos atentados ponen en riesgo su salud y sus fuentes de agua. En respuesta, se convocó a una asamblea en la comunidad de Sinchi Roca, donde exigieron mayor transparencia en las acciones de mitigación y garantías para evitar nuevos derrames.
Petroperú ha informado del atentado a las entidades competentes, incluyendo el OEFA, el Organismo Supervisor de la Inversión en Energía y Minería (Osinergmin) y la Fiscalía Especializada en Materia Ambiental (FEMA). Se espera que el Ministerio Público y la Policía Nacional del Perú realicen la constatación del hecho en las próximas horas se identifiquen a los responsables.
Mientras tanto, la comunidad insiste en que las autoridades adopten medidas urgentes para proteger el ONP y prevenir futuros atentados. Los líderes comunales han solicitado que se implementen medidas concretas de prevención y remediación para garantizar la seguridad de su territorio y la protección del medio ambiente. (K. Rodriguez)