- Opina el Dr. Jaime Meléndez Aspajo, agregando que esos plazos no son razonables ante procesos que necesitan de urgente atención.
Puso de conocimiento un proceso en el que un hombre atropelló a un señor y que luego se ha querido acoger a la terminación anticipada, pero se le está programando su audiencia para el mes de septiembre del año 2026.
“Hay una situación que debe corregirse, por lo que hago un llamado al presidente de la Corte Superior y a su equipo técnico para ver de qué manera se puede superar ese problema. Se deben tomar precauciones urgentes.
Se vienen programando una serie de audiencias para dentro de un año. Por ejemplo, el caso de un señor que atropelló a otro y le causó una lesión. El demandado quiere someterse a una terminación anticipada para resarcir el perjuicio ocasionado al agraviado ya que necesita de terapias y eso tiene un costo.
Sin embargo, la fiscalía le comunica al juez, pero en el juzgado se le ha programado la audiencia para el mes de septiembre del año 2026. O sea, exactamente para el próximo año, ese no es un plazo razonable, atenta contra el debido proceso. Los abogados sientan su extrañeza porque lo que se espera es una justicia oportuna.
Conocemos que hay labores recargadas, pero hay que priorizar los casos urgentes a nivel penal, también hay procesos civiles. El plazo es demasiado largo y eso causa una gran preocupación para todos” expuso Meléndez Aspajo.





