Por: Ángel Charpentier Saldaña
El debate ideológico entre Derecha e Izquierda en el tema político, es algo que siempre despertó interés, tal ves porque en el fondo es difuso y no se comprende, o sencillamente, porque a través del tiempo, el análisis político se circunscribió a aspectos ideológicos poco claros.
La definición se orienta en los hechos a asociar: Derecha al capitalismo, Izquierda al comunismo y/o socialismo. Pero el debate no culmina sino que habría que diferenciar dos campos vitales, el teórico y práctico para tratar de entender el tema. Al igual que la derecha, la izquierda política oscila entre un mayor o menor autoritarismo. A diferencia de la derecha plantea la igualdad.
Históricamente sus antecedentes se remonta a la Francia pre revolucionaria, específicamente a la Asamblea Nacional, por la ubicación en sus escaños de los jacobinos, asambleístas que defendían los derechos de los pobres y que siempre lo hacían al lado izquierdo.
EN TEORIA: no encontré definición académica clara pero intentamos esbozar una idea en general. La izquierda esta sustentada en la lucha de clases, muy bien fundamentada en el manifiesto comunista de la primera internacional socialista a los proletarios del mundo, o sea, a su naturaleza comunista, con cierto rasgo anarquista, la derecha por su origen encuentro filiación marcada en el capitalismo.
Como se puede notar, la diferencia se plasma en el rol desempeñado en la generación de la riqueza, y se fundamenta en la relación capital-trabajo.
En la práctica, la identificación es mas directa: Izquierda a los generadores de mano de obra como fuente de riqueza y derecha, los tenedores del capital, dueños del dinero. La izquierda encarna a los explotados, derecha a los explotadores. En su derivación política, izquierdistas a los que defienden a los explotados, obreros y proletarios; derechistas a los que defienden el capital, con todas sus expresiones de clase. En su entender práctico, denomínese izquierdista al que defiende al pobre, campesino, obrero y/o proletario. Derechista al que se identifica con el rico, defiende al empresario y se abandera con el capital. Todo esto tiene una correlación histórica desde los inicios del poder: amos y esclavos en la sociedad esclavista, siervos y señores en la sociedad feudal, burgueses y proletarios en la sociedad capitalista. En su periodo, aparecieron los defensores de los desposeídos: Espartako en tiempo del esclavismo su líder rebelde. Durante el feudalismo como defensor de los pobres apareció Robin Hood y en la actualidad su icono más relevante del proletario y desposeído, carne de cañón de los ricos en ésta parte del mundo, el Che Guevara.
En ambos bandos han aparecido sus mentores, acólitos defensores como abanderados de la verdad; siendo más acalorado el debate en el contexto socioeconómico, la tenencia de los medios de producción, la explotación del asalariado y políticamente, en la toma del poder. En el campo socioeconómico la manzana de la discordia es la plusvalía y en el político la lucha revolucionaria para el cambio de la correlación de fuerzas.
A dónde quiero llegar en el análisis, es al comportamiento ético de ambas propuestas y el por qué de la agudización del conflicto social, como madre del dilema.
Teniendo en cuenta que los dones mas preciados del hombre son: la vida, la libertad y la propiedad, en ambos casos sus defensores hicieron poco o nada para cimentar en la sociedad estos derechos, uno en mayor dimensión que el otro, han avasallado, pisoteado y menospreciado estos justos anhelos del hombre.
La experiencia me hace conocer que en ambos bandos se vulnera el derecho irrestricto a la libertad, esa libertad solemnemente reconocida en la constitución universal que es la declaración universal de los derechos humanos.
Tanto la democracia liberal como expresión de la derecha, como los gobiernos izquierdistas mas dogmáticos, han vulnerado este derecho haciendo abuso del poder, ambos han confiscado medios de comunicación y pusieron en practica por diversos medios la ley de la mordaza.
El derecho a la vida ha sido vulnerado por las dos corrientes. Los juicios populares y el abuso del poder con impunidad, constante mente denunciada, ha sido puesto en práctica por las dos corrientes. Ni que hablar de la violación a la propiedad privada, los izquierdistas con el consabido lema: «la propiedad es para quien lo necesita y no de quien lo posee» impunemente han violado la propiedad ajena con el prurito de repartir a los pobres; y en el otro lado, el poder del dinero inescrupulosamente a través de la ley, se ha cometido abusos contra el que menos tiene, despojando al indefenso de sus bienes honestamente adquiridos. En ambos casos, predomina la fuerza del que mas poder tiene.
Lo común entre derecha e izquierda es la lucha por el poder, ambos buscan el poder cuando el contrario le posee. .
En su versión moderna, se interpreta como derecha a los representantes de la democracia liberal representativa, izquierda a los gobiernos totalitarios fruto de la revuelta popular. La variante de esta última es, la toma del poder a través de las urnas para después implantar la «dictadura del proletariado»
Por las razones antepuestas, soy escéptico ante corrientes tales como la del presidente Chávez en Venezuela, Castro en Cuba o Mahmoud Hamadinejad en Iran por un lado y, Obama y su corte de los grandes del Capitalismo por el otro lado, porque ambos sistemas han cometido escandalosos abusos de lesa humanidad contra el hombre, ambos defienden sus intereses de grupo y ambos en el poder, se enriquecen a costilla del Estado; de ese Estado al cual juraron servir, por todo ello cuando la verborrea de uno y otro escucho, no hago mas que decir, pura hipocresía.