Los sectores que se han unido más que nunca en los últimos años, son el sector público y privado. Los primeros contratando a los segundos para las diversas acciones de desarrollo del país, de las regiones, provincias y distritos, aunque sin el éxito deseado, o en un alto porcentaje de efectividad.
La colusión para defraudar al Estado ha sido uno de los fuertes en esta unión, pero es importante remarcar que sí existe en el sector privado experiencias exitosas que con el sector público de turno realizan proyectos que se sostienen en el tiempo.
En ese marco, la presidenta Dina Boluarte, se ha referido a ese trabajo en conjunto como fundamental para impulsar las inversiones y el empleo en el país, con lo cual se puede garantizar el desarrollo nacional. “Reconocemos su esfuerzo y lo decimos de manera clara y firme, somos aliados en el objetivo de impulsar la economía peruana para mejorar la calidad de vida de los peruanos en todo nuestro territorio”.
En realidad, nos falta mucho para que esa colaboración entre lo público y privado tenga el prestigio que asegure el desarrollo nacional desde las poblaciones más vulnerables, son pasos pequeños los que se han dado, por eso estamos lejos también de ser una nación desarrollada.
Aunque la Presidenta manifestó que se vienen creando las condiciones adecuadas para que “el Perú prospere y crezca de manera inclusiva y sostenible, a través de este trabajo conjunto es que alcanzamos resultados tangibles que benefician a todos los peruanos. Hoy vemos cómo nuestros esfuerzos conjuntos dan frutos, las proyecciones hablan de un crecimiento del 3 por ciento al cierre del año, lo cual permite retomar la reducción de la pobreza.
“La unión con el sector privado y público es la clave para impulsar el desarrollo y el bienestar del país”. Es una responsabilidad social también contribuir, ojalá que las futuras publicaciones de estadísticas nos demuestren que ese avance por el trabajo conjunto, puede ser más real llegando a bajar cifras negativas.
Público y privado
