Pluspetrol Norte se va de Loreto

Mediante una comunicación oficial dicen que empresa se ve obligada a liquidarse.

Ante la continuación del severo atropello de sus derechos por parte del OEFA que la empresa ha venido denunciando, Pluspetrol Norte S.A (PPN) se ve obligada a liquidarse. Este anuncio sin duda deja en jaque a la economía de Loreto.
Esto acontece tras una lucha de más de 8 años para que se aplique a PPN lo que con claridad dice la ley ambiental pe-ruana, además de un laudo arbitral inapelable. La empresa ha recurrido a todas las instancias legales, optando final-mente por exponer el caso frente a la opinión pública, sin lograr que el OEFA ponga fin a su arbitrariedad
Lo que PPN ha denunciado es que el OEFA viene exigiéndo-le remediar pasivos ambientales dejados por las empresas que operaron en la misma zona con anterioridad a la llega-da de PPN. Por esta exigencia, se acaba de negar la aproba-ción en tercera instancia del Plan de Abandono del lote 192.
Eso ocurre pese a que la ley peruana establece claramente el principio “el contaminador es el pagador” y a un arbitraje internacional que tiene calidad de cosa juzgada y que dio la razón por unanimidad a PPN, confirmando que la empresa no había asumido por contrato estos pasivos.
Peor aún, el OEFA está exigiendo a PPN remediar los pasi-vos de manera que no tiene sustento legal, técnico o lógico. Por ejemplo, exigen a PPN dejar los suelos, situados en ple-na selva amazónica, a nivel agrícola. Una intervención muy agresiva en la amazonia que generarían impactos ambien-tales muchos más grandes que cualquier potencial benefi-cio.
Debe subrayarse que, en buena medida, este asunto no tra-ta de afectaciones ambientales ocurridas durante los años de la presencia de PPN en la amazonía peruana, sino de pa-sivos claramente identificados (y reconocidos por el mismo OEFA) como anteriores a ella.
Así pues, la persistencia del OEFA en el abuso no ha dejado a PPN con más opción que iniciar el proceso de su liquida-ción. La empresa lamenta esto particularmente en un con-texto en el que, con un entorno cada vez más adverso y con lotes sin poder operar desde abril, el oriente peruano va quedándose sin inversiones para la actividad petrolera. (DL)