Fernando Herman Moberg Tobies
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@FernandoMobergT
“Siempre los del medio estamos fregados, los programas sociales para los pobres no nos benefician en nada a nosotros, los estilos de vida de los de arriba es inalcanzable con lo que tenemos, la gente de clase media, la sociedad emergente, la nueva base del sistema se la suda, se la juega, apuesta, arriesga, nos destruyen, pero seguimos, nosotros la nueva masa popular necesaria la sufrimos más que nadie” comenta Oswaldo a su primo Santiago mientras caminan por la vereda del bulevar Tarapacá.
“Nos educan a cómo pueden nuestros padres, luego los dioses humanos, poderosos, manipulan nuestras emociones con sueños y esperanzas materialistas que nos convierten en hormigas hacendosas para conseguir lo que queremos y servir eternamente a otros, nuestros vacíos emocionales nos condicionan a soportar situaciones que a veces ya conocemos las respuestas, pero no logramos hacer nada, y después de tanto show que nos cuesta hasta la salud, somos nosotros mismos los autores de nuestro éxito, el sistema no nos sirve tan fácilmente, directamente, así que por eso te digo que los jóvenes que salen de esas condiciones, deberían ser reconocidos o existir proyectos de apoyo que también sean para este sector”, continúa hablando Oswaldo.
“Dijiste algo que no lo había percibido, es verdad, los emprendedores son los outsider del sistema económico, los que vienen de los programas del Estado tienen gran probabilidad de que consigan grandes logros si saben direccionarse, los de clase alta en su mayoría están asegurados hasta sus errores, pero los de clase media, el nuevo impulso emergente se la suda mal querido hermano, hasta pasamos por una especie de discriminación severa pero calante, porque no figuramos en la pobreza no hay algo que nos dé un respiro, un alivio de la lucha de sobrevivir en una realidad donde todo está establecido a base de economía, la salud, la educación y hasta las oportunidades, todo es cansado”, responde Santiago mientras mira la pantalla de su celular.
“Nos tienen bien fregados, las autoridades como saben que andamos interesados en nuestro progreso, en nuestro posicionamiento, saben que estamos tan distraídos que no crean o proponen algo que realmente nos dé un soporte, nos contentan con pistas que duran menos que sus gobiernos, se jactan de invertir en esto y en lo otro, que a las justas nos sirve indirectamente y no como se golosean ellos directamente con tanta indiferencia”. Oswaldo se seca el sudor que empieza brotar en su frente.
Santiago se levanta, camina hacia la mesa en donde el hielo se derrite, llena dos vasos y coge la botella de whisky, avanza hacia donde Oswaldo que sigue mirando las nubes en silencio cómo si tratara de encofrar un mensaje en las nubes misteriosas y le dice: “Tranquilo primo, mejor sírvete un vaso que para eso trabajamos, para gozar cada centavo en un placer creado por el hombre y vuelto necesidad jajajaja, nadie nos regala nada, toma, salud.”
“Eres un loco Santiago, cómo te gusta el buen trago jajajaja, todos deberíamos beber lo mismo, gozar lo mismo y hasta sufrir lo mismo para tener conciencia de que cada uno está en su lucha y eso se debe respetar jajajajajaja, pero, bueno primo, salud, salud por aquellos que se olvidan qué es el ser humano y no aprenden a domar a la bestia del sistema, jugando sus mañas, pero sin convertirnos en su esencia”
“Primo, a veces en las reuniones del club dicen que eres socialista, otros que eres comunista y otros de que Oswaldo es de izquierda, pero ninguno acierta, los que te conocemos y vamos en el mismo camino, no tenemos etiquetas, hacemos las cosas porque nos nace la justicia”.
“Santiago ya pareces muchacho, preocupado por tu imagen jajajajajajaja, ya hemos pasado la adolescencia para encajar a toda costa y ser aceptado por el entorno en el que nos hemos criado; lo más gracioso y alejado de la realidad son los nuevos adjetivos que me ponen los hipócritas moralistas que moldean lo que les conviene. Empezando, primito, me han acostumbrado a algunas comodidades banales que son parte de mí y que es difícil de cambiarlas, pero son partes de mí, no mi todo, tampoco puedo negar o ser mentiroso, mis padres me han dado lo que a ellos les han enseñado igual, me gusta mis comodidades, la buena comida, viajar para conocer e investigar, la paso genial en buenos lugares y hasta gasto regular dinero en tonterías, pero para eso me saco el ancho, tengo tres trabajos, duermo poco y paro a veces hasta histérico conmigo mismo. Cuando he ido creciendo, aprendiendo cosas fuera del círculo, es sorprendente lo que puedes hacer o simplemente callar, no se puede hacer dinero explotando, insultando, marginando, denigrando, no hay forma para una persona inteligente hacer eso.”
“Oswaldo, eres un quemado, recuerdo la vez que causaste un escándalo en la fiesta de accionistas de la empresa del abuelo, tienes un cerebro rebelde, ese video que pusiste en vez del institucional fue devastador, trabajadores contando sus experiencias familiares, sus hijos con depresión, anorexia, delincuencia juvenil, drogas, robos, hijos sin motivación para mejores expectativas; cuando los empresarios miraban el video sentían asco de sus almas que prefieren hacerse los ciegos y seguir callando a su conciencia, sus miradas, el silencio del salón, el drama que metiste de cómo sufren los empleados para mantener un sistema que no los valora realmente, estuvo fuera de serie”.
“Sabes que el abuelo me dejó sin regalos de navidad ese año y me quitó el carro que me había regalado, según porqué si tan puro y justo yo era, no tenía sentido de gozar los frutos del dinero mal habido; eso es algo que de este grupo también me parece ridículo, o sea ¿si crees que existe la equidad no hay forma de gozar y apoyar? O sea, si piensas que la gente necesita más respeto y mayor interés acabas ¿estigmatizado? Que ridículos, Santiago”.
“Por eso también estamos fregados, los que dirigen no comparten y los que siguen no cuestionan; a veces me da cólera que la falta de información genere personas que no conozcan el verdadero poder que tenemos frente a un sistema tan contaminado, y que podríamos hacer que se enderece si lográramos ser menos individualistas, hacemos viacrucis solos, cargamos separados inmensas cruces de metal que nos olvidamos que sería más fácil si utilizáramos las estrategias adecuadamente, los empresarios lo usan, los poderosos y políticos lo usan, crean alianzas, sub sociedades elitistas, las masas dicen que no les interesa la política y dan sus votos a quien mejor movió sus emociones, no su raciocinio. Oswaldo, mientras que el pueblo no se dé cuenta de su valor para influenciar en la política, no habrá cambio, ya que otros negocian, cierran y direccionan a sus necesidades.”
“Primo, mejor toma tu vaso, brindemos porque algún día nuestra raza humana sea bien dirigida, brindemos por los amigos que tenemos que son jóvenes que vienen desde abajo, con los golpes de un sistema exclusivo y manipulador y que llegan a ser la imagen de la esperanza en la perseverancia, vamos bien primito, me alegra compartir estos proyectos contigo, estamos aportando a nuestra sociedad sin juzgar que somos de derecha, izquierda, centro o hasta extraterrestres jajajajajaja, somos personas consientes que creemos que cuando uno tiene potencial no necesita pisar a los demás, salud Santiago”
“Salud primito, gracias por creer en lo que está por encima de la comprensión lucrativa humana, si nosotros que hemos tenido la dicha de una buena educación, estamos ahí compartiendo sin juzgar, algo bueno en su momento llegará y ni siquiera para nosotros, sino para esos niños que como tú y yo también tienen anhelos, sentimientos y, por último primo, somos la misma vaina.”
