Para evitar la incertidumbre que generarían las recientes modificaciones sobre el proceso electoral aprobadas en primera votación parlamentaria respecto a las dádivas, el Jurado Nacional de Elecciones a través de su actual presidente, Víctor Ticona, ha pedido al Congreso de la República considerar la aplicación del procedimiento de FLAGRANCIA a los candidatos que entreguen dádivas en campaña.
Ello para poder determinar con prontitud si procede o no su exclusión mediante una sentencia judicial. Y recordó que el Código Penal en su artículo 356, reconoce el delito de “inducción al voto”, razón por el cual plantean que en paralelo al procedimiento administrativo en la ONPE, los candidatos que entreguen dádivas sean remitidos a la Fiscalía para que proceda conforme a sus atribuciones.
Esto ha sido como un pare en seco a lo que la mayoría parlamentaria aprobó en primera votación y dentro de sus argumentos dijeron que fue en base a un planteamiento del Jurado Nacional de Elecciones, por lo que el ente electoral del país, entendemos se ha visto obligado a explicar detalles del proyecto de Código Electoral que presentaron en abril al Legislativo (Congreso).
La propuesta no induce a flexibilizar el tema de las dádivas como lo que se aprobó mientras todo el país se embelesaba con el partido Perú – Argentina. Ahí en el congreso se jugaba otro partido y no precisamente en mejorar las condiciones de elegir a las próximas autoridades en el país.
El mismo presidente del JNE Víctor Ticona ha dicho que en la propuesta que presentaron, proponen modificar el artículo 42 de la Ley de Organizaciones Políticas para que este delito (dádivas) sea tramitado a través de un proceso inmediato que se resuelva en horas o en escasos días.
Esto por supuesto difiere mucho de lo aprobado en el Congreso cuando habla de aplicar la sanción de exclusión en caso haya reincidencia y se muestra ambiguo en cuanto al pago de la multa y las sanciones inmediatas. Ni menos se habla de flagrancia como ahora aclara diplomáticamente el señor Ticona. También dijo que plantean la responsabilidad solidaria entre el candidato y la organización política para el pago de la cuota sancionadora.
En fin, son varias figuras que se tendrían que considerar en una verdadera reforma electoral que no prosperó en el Congreso de la República, cuando lo presentó el equipo de trabajo de la congresista Patricia Donayre, sujeto a debate y modificaciones, por cierto. Pero, tenemos que seguir siendo testigos de manejos antojadizos a la medida de una forma equivocada de proyectar el destino de un país. Así no se hace patria.