Desde que empezamos a viajar por los ríos de nuestra región Loreto y aprendimos a ver de noche, a distinguir la ribera en la oscuridad, a ver la bravura del río cuando hay vientos y disfrutar en la hamaca una noche de lluvia suave, sabemos que existen normas de navegabilidad que no se cumplen en general.
Cada vez que ocurre un accidente fluvial salen estos temas de vital importancia y que poco se difunden, por eso hay mucho trabajo por hacer en el tema de educación de la navegación fluvial; así como se incide en el cumplimiento de la normativa en las vías terrestres, acá o en cualquier lugar del mundo.
Varias veces estando en comunidades rurales y nos dio la noche, la mayoría de los ocupantes decidieron que retornemos a la ciudad, no importa sea de noche porque el conductor es “experimentado”, pero cuando se presentan los accidentes todos se miran y a decir “yo no fui”, por señalar de alguna manera que los culpables son siempre otros, menos la irresponsabilidad que como pasajeros muchas veces cometemos.
Y dados los hechos, quién responde por la vida de inocentes criaturas como en el último accidente fluvial en la zona del río Huallaga, donde las versiones de los sobrevivientes son totalmente diferentes al de la empresa fluvial, es como una palabra contra la otra, que sí hubo luces de seguridad y que no hubo y por eso se chocaron.
Las investigaciones que se vienen realizando seguramente nos aproximará a lo que ocurrió, pero de lo que así estamos seguros porque se nota a la vista, es que así como nos falta educación vial, también nos urge educación fluvial con lo más importante de su reglamento.
Esa parte responde a un proceso que se debe inculcar en casa y desde las escuelas y como parte de una campaña, es que somos hijos de una tierra donde el bosque y el agua predominan, y por tanto conocer cómo se funciona en el bosque – tierra y el río, debe ser algo natural para nosotros los loretanos.
Y se tiene que seguir repitiendo que las embarcaciones fluviales menores no deben navegar en horas de la noche, el reglamento del transporte fluvial así lo indica. Es un asunto de seguridad a favor de la vida.
Navegación nocturna
