- Totalmente alcoholizado ingresó a su hogar y poco faltó para que le corte la yugular.
El último sábado la promoción del CEI 849 de “Nueva Esperanza” programó un evento deportivo con la finalidad de recaudar fondos para los gastos de promoción, en la cual como es de costumbre, se comparte el masato hasta que se termine. La actividad estaba prevista en el local comunal, sin embargo, ese mismo día sabiendo que había una actividad comunal, el candidato Alcides, hace una coordinación con el Cacique y la profesora para que se haga la fiesta en el mismo local comunal.
Eso causó resentimiento en algunos padres de familia que no apoyaban a Alcides, como el famoso Dugo Hernández que es de la agrupación política A. Al término del evento el programó su actividad política en su casa con la presencia de Nelson Tambor.
Hubo dos fiestas, al mismo tiempo dos tomadores. Los dos líderes estuvieron presentes en dichas fiestas políticas donde por supuesto invitaban alcohol. El hijo de “pupuchi” es un muchacho de apenas 18 años que según versiones estaba tomando en la fiesta de la A y de ahí inexplicablemente fue a cometer tan grave intento de homicidio.
“En mi calidad de padre de familia y docente al escuchar el llamado desesperado de la profesora que se desangraba, inmediatamente la acogimos y luego con los auxiliares se le llevó hasta la posta.
Se montó el operativo “Allku” en ambas fiestas. Siendo la 1 y 30 de la madrugada se logró capturar al joven secoya quien había intentado matar a la profesora. Se le cogió y metió en el baño de un colegio hasta que aclare el día, pero lamentablemente el muchacho se “voló”.
El último domingo descaradamente el muchacho regresó a la comunidad en compañía de sus padres que lo llevaron de grado o fuerza, para que arreglen de buena fe con la profesora” narró un docente desde la zona.
El consejero del Putumayo Prof. Josué Iracude Calderón, también se pronunció sobre el intento de asesinato.
“Todas estas acciones graves al final quedan en nada debido a que en esas comunidades no hay un puesto policial. Hace muchos años estaba presente la guardia republicana que impedía el tráfico de madera, luego se fue y ahora todas las comunidades están a mansalva de actividades ilícitas.
Y no solo eso, como ya ven, hasta nos pueden matar sin que haya donde acudir de inmediato. La situación de olvido a la que está sometido el Putumayo, es gigante y atroz” opinó Josué Iracude.





