Honrando su palabra, el compromiso contraído, el presidente Ollanta Humala ha ido hasta Pueblo Libre, la zona más emblemática de Belén para hacer entrega de 500 títulos de propiedad a los vecinos de ese sector, asegurando que en breve se entregarán 1,000 títulos más, cumpliendo así su promesa de campaña, ejemplo para aquellos políticos que una vez llegados al cargo se olvidan de quienes con sus votos les ungieron como autoridades, en un olímpico desprecio a quienes confiaron en ellos.
El presidente fue más allá aún. Al alcalde belenino, Hermógenes Flores, le hizo entrega de un cheque por más de 4 millones de soles para la construcción de pistas y veredas que le den una nueva cara a nuestro querido Belén. Pero sí fue bien claro, al expresar que él mismo vendrá a supervisar el uso de ese dinero que no podrá ser desviado a otros fines, menos todavía malgastado, porque es su deseo que Belén sea de aquí a poco una zona turística, que vaya más allá de lo que conocemos como la Venecia peruana.
Para eso, hay que hacer saneamiento ambiental y dedicar todos los esfuerzos a ofrecer seguridad ciudadana.
Ollanta Humala ha dicho que está muy agradecido por el apoyo que el pueblo de Belén le ha brindado en las elecciones, demostrando así ser una persona agradecida.
Se espera que no solo Belén sea la beneficiada con el cumplimiento de promesas electorales, sino todos los demás pueblos loretanos que esperan que su presidente llegue hasta ellos.
Las promesas se cumplen, sin dudas ni murmuraciones, presidente.