Realmente es un soplo la vida, y 20 años no es nada. En un abrir y cerrar de ojos han transcurrido dos décadas desde que un 21 de marzo de 1,992, los canillitas iban gritando por las calles el nombre del nuevo diario. La Región celebra hoy, un aniversario más de presencia en el trajinar de nuestro pueblo. 20 años registrando la historia, escribiéndola día tras día, guardando la memoria de los hechos protagonizados por nuestra gente.
Desde aquella vez, nuestras páginas son portadoras de los sucesos que se dan en las calles, de la tristeza por la pérdida de un ser querido caído en un accidente, de la protesta justificada o no, de la lucha contra la delincuencia, de las solemnes manifestaciones de recogimiento religioso y del estallido de la alegría.
La Región se ha constituido en el devenir del tiempo en el diario que ha sabido mantener una línea sobria y seria, de un nivel periodístico de acuerdo a la responsabilidad del rol que le corresponde en la sociedad loretana.
Por sus páginas han pasado las plumas de distinguidos periodistas y diversos profesionales que con sus comentarios y opiniones han ido formando corrientes de opinión encaminadas a resolver los más urgentes problemas ciudadanos. Aquí, se han formado muchos otros que han sabido escuchar y seguir los consejos de viejos periodistas que aportaron su experiencia en la formación de nuevas promociones de los nuevos valores de la prensa que hoy tienen importante presencia en el quehacer periodístico.
En esta fecha, quienes a diario hacemos La Región, no podemos dejar de reconocer la labor de quienes nos antecedieron, de José Morante Portal y Oscar Olavarría Saldaña quienes fueron sus directores, hoy en la eternidad, pero que siempre vivirán en nuestro recuerdo. Nuestro saludo a la señora Organda Sifuentes Pinedo y a Don Lincoln Cornejo Venancio, forjadores y pilares de esta casa editora, quienes supieron cimentar en credibilidad la construcción de este diario.
Finalmente, gracias a nuestros lectores por su preferencia, a nuestros patrocinadores y anunciantes quienes tienen nuestras páginas para publicitar sus productos y servicios y, gracias a Dios por iluminarnos con su Luz Divina el camino a seguir.





