-La ilegal mercancía se encontraba en el «carmín» de una de sus menores hijas.
-Mujer fue conducida hasta las instalaciones de la DIVANDRO.
Todos los miércoles acostumbraba ir de visita en horas de la mañana al establecimiento penitenciario Iquitos (Guayabamba) para visitar a su pareja que fue sentenciado por el delito de robo agravado, siempre acostumbraba llevar a sus dos hijas menores, una de 5 años y la otra de 3 para que supuestamente el padre las pueda ver y así pasar momentos de felicidad con cada una de ellas; sin embargo, ayer cerca de las 10 de la mañana, toda esta alegría que siempre tenía el interno se derrumbó porque agentes del INPE intervinieron a su conviviente, Sintia Vanecía Sinti Hutangari (25), quien a provechando la inocencia de su menor hija de tres años intentó hacer ingresar PBC a este centro penitenciario.
«No sé cómo apareció la droga ahí, siempre vengo a visitar a mi marido con mis dos menores hijas, todos me conocen y me sorprendió ver que la pasta se encuentre en el carmín de mi hija», sostuvo en su defensa la mujer.
Sinti Hutangari estuvo por más de 7 horas en el interior del penal, donde las autoridades de este centro le interrogaron para conocer a quién o a quiénes iba dirigida la ilegal mercancía; horas más tarde llegaron agentes antidrogas y el fiscal especializado en temas de TID para levantar el acta correspondiente y posteriormente conducir a la mujer hasta las instalaciones de la DIVANDRO.
Fuentes policiales informaron que la niña, una de las hijas de la mujer, llevaba en su moño 61 gramos de PBC que estaban perfectamente puestos en una bolsa de plástico y bien camuflados en el carmín de la menor. Policía y miembros del INPE vienen investigando el caso para las diligencias correspondientes. (C. Ampuero)