Por: Dr. Eduardo Vásquez Lozano
Nefrólogo – RNE 21729
La terrible enfermedad renal silenciosa, indolora y agresiva se ha convertido en un dolor de cabeza para la salud pública en el mundo. Sin embargo, muy al contrario de lo que la mayoría de personas cree, esta enfermedad no te avisa que está consumiendo la función de tus riñones y que probablemente muy pronto vas a necesitar ayuda con la diálisis.
La enfermedad renal crónica afecta al 10% de la población en todo el mundo, esto ha llevado a que muchos países incluyan dentro de sus programas principales el control de las llamadas enfermedades metabólicas como la diabetes, la presión alta, la obesidad, pues estas son las principales proveedoras de pacientes con insuficiencia renal en diálisis. En el Perú el registro de EsSalud informa una incidencia de 215 pacientes nuevos que ingresan a diálisis por millón de habitantes y una prevalencia de 933 pacientes por millón de habitantes que continúan en diálisis, hasta el 2014.
Debo hacer recordar también una no muy grata noticia, esta enfermedad no tiene cura y los síntomas de la insuficiencia renal, como pérdida de apetito, náuseas y vómitos, aparecen demasiado tarde cuando probablemente no podamos hacer nada y la terapia en diálisis se hará inevitable. Pero, acaso, entonces no se podrá hacer nada? (estarás pensando), debo esperar sentadito y rogar que por favor no tenga «la mala suerte» de enfermarme de los riñones? A esto debo contestarte con un rotundo NO. Ahí es cuando las noticias pueden ir mejorando. Les contaré que esta enfermedad es PREVENIBLE, esto significa que tenemos que trabajar en adoptar y mantener ciertas costumbres muchas veces olvidadas en la mayoría de nosotros: Beber 2L de agua (¡ojo! no gaseosas, escribí agua), mantener el peso ideal con ejercicios y dieta balanceada, disminuir la ingesta de sal, evitar alimentos que aumenten ácido úrico (carnes rojas, chocolate, mayonesa, mantequilla, etc.), debemos controlarnos la presión y los niveles de glucosa en la sangre, más aún si tienes antecedentes familiares de estas dos enfermedades (presión alta y diabetes), no exceder el uso de medicamentos (la mayoría de los analgésicos y antibióticos que seguramente te has automedicado pueden causar daño a tus riñones si lo usas prolongadamente), evitar bebidas alcohólicas y no fumar.
Todos los segundo jueves de marzo, desde hace 11 años, se recuerda a la población la importancia de mantener sus riñones sanos, titánica tarea que no debemos desmayar. Un riñón fuera de diálisis es bueno para el paciente, es bueno para su familia, es bueno para su médico y también es bueno para el sistema. No hay una pastilla milagrosa para salvar a tus riñones, que tus riñones no tengan problemas depende sólo de ti y la mayor parte de las veces será una consecuencia de lo que hayas hecho durante tu vida.
Este año los organismos internacionales han querido adelantarse mucho más a las etapas de prevención y se remarca la importancia de iniciar una infancia sana y alcanzar una vejez libre de enfermedad renal. Bajo el lema «Niños y Enfermedad Renal ¡Actúa a tiempo para prevenirlo!» se pretende crear conciencia en una nueva generación, una generación en la que se pueda sembrar lo que ahora se ha olvidado, que es la importancia de PREVENIR.