Las reglas de juego desde la visión del Estado casi siempre viene de arriba hacia abajo, en el entendido del poder político. Por eso cuando se habla de inclusión social es el figurativo de que los servicios del Estado deben llegar a las y los peruanos que habitan en zonas aisladas por diversos factores.
La ministra de Desarrollo Social e Inclusión Social, Paola Bustamente, estuvo dos días en Iquitos realizando diversas actividades en torno al tema de la inclusión social, supervisando los programas sociales que el Estado tiene en beneficio de las poblaciones vulnerables. Y en nuestra región especialmente las indígenas y las de zona fronteriza, donde también existen poblaciones étnicas.
Como se conoce, a través de las Plataformas Itinerantes – Pias, (barcos fluviales) se viene llevando los servicios del Estado a muchos pueblos y esto es positivo. La ministra también lo supervisó. Se han hecho ajustes en cuanto a cómo ser más eficientes en este trabajo social. Y así fueron aumentando más entidades dentro de la plataforma. Salud, Educación, Juntos, Pensión 65, Banco de la Nación, etc.
Efectivamente es un esfuerzo desarrollar todo este programa fluvial social. Eso nadie se los quita. Sin embargo, van surgiendo nuevos planteamientos porque la mirada es desde acá hacia ellos, pero, estas poblaciones en su análisis desde la realidad que viven, nos lanzan retos impensados como al decir «queremos incluir al Estado». Esto lo escuchamos en distintas formas y en variadas reuniones.
Qué nos han querido decir. Quizás que es insuficiente una presencia temporal. Que tiene sí un impacto positivo. Pero, no deja de ser un paliativo. Es decir tenemos que seguir pensando en fórmulas más estables para estos pueblos que reclaman en otras palabras, la presencia del Estado de forma permanente. Más sentida, más palpable. Ellos y ellas quieren ‘incluir al Estado en sus vidas cotidianas´. Valoran el esfuerzo, pero rechazan un Estado turista. Les asiste el derecho constitucional. Nomás queda seguir mejorando las fórmulas de atención a las poblaciones menos favorecidas.