¡Feliz Navidad Amazónica! desde Iquitos – Perú


“Se escucha en la selva el bombo y la quena…María y Jesús en su tambo esperando a San José en la cocha pescando…Suena el Manguaré…Vamos por el bosque para conocer al llullo Manuel…El llullo ha nacido en un aguajal….
Al paso de los más de dos mil años desde el nacimiento de Jesús, los países que adoptaron el cristianismo como mensaje espiritual y al catolicismo como la religión que nos conduce a la salvación del alma hacia la eternidad, han venido adaptando el escenario del nacimiento y la vida del Niño Dios, al contexto de su sociedad, de la realidad en la que viven.
Así en Iquitos y en Loreto en general en la década del cincuenta y sesenta, podíamos observar nacimientos basados en la realidad hebrea y las adecuaciones de las naciones europeas, y pocos años después vino la idea de que Jesús también ha nacido en la selva amazónica del Perú, en cada uno de los tambos, a orillas del río, en las casas mestizas, en las malocas indígenas, en una hamaca del campesino del bosque loretano, etc.
Es justo reconocer y agradecer la gran labor en esta adecuación de la representación simbólica del nacimiento de Jesús, al Centro de Estudios Teológicos de la Amazonía Peruana – CETA, cuyo director fundador el padre Joaquín García Sánchez, es su principal mentor y su obra ha sido reconocida a nivel regional, nacional e internacional.
Cuando estaba reinando el emperador Constantino el Grande, la iglesia propuso que el 25 de diciembre se celebrara el nacimiento del Salvador por su coincidencia con el festejo romano llamado Sol Invictus. Muchas personas colocan Nacimientos para representar el nacimiento de Jesús.
Un 25 de diciembre hace más de dos mil años, nació en un humilde pesebre en la aldea de Belén, situada unos 9 km al sur de Jerusalén y enclavada en los montes de Judea, en Israel, Jesús de Nazaret, el que más tarde sería Cristo, la figura central del cristianismo.
CRISTO SIGNIFICA EN HEBREO MESÍAS O UNGIDO DE DIOS
Jesús se considera que es el Mesías profetizado en el Antiguo Testamento, que sería el salvador o redentor de los hombres. Por eso se le llama Jesucristo (Jesús Cristo).
Cada 25 de diciembre se celebra un aniversario más del nacimiento del niño Jesús con la festividad de Navidad, también conocida como la Natividad del Señor. La Navidad es la festividad más popular de la iglesia cristiana, aunque está considera más importante la Pascua.
Desde varios días antes a esta fecha, no falta en cada hogar cristiano una representación de este acontecimiento, usando figuras y un arbolito, real o artificial, conocido como el Arbolito de Navidad.
Nunca deben faltar la simulación de un pesebre con los pastores adorando al Niño, animales de granja, frutos y otros obsequios. Antigua pintura del nacimiento de Jesús de Nazaret, en un humilde pesebre en Belén.
La Navidad es celebrada por los cristianos, pero también por gente no creyente. Algunos utilizan la Navidad como festejo de convivencia social y familiar sin estar vinculada a alguna religión.
IMÁGENES DEL NACIMIENTO DE JESÚS
El Nacimiento de Jesús ha sido representado en miles de obras de arte a lo largo de la historia.
Compartimos en esta página varias imágenes, que se pueden descargar libremente para imprimir o compartir con amigos en las redes sociales usando los botones.
Pintura que representa el nacimiento de Jesús. En ella se ve al niño Jesús, su madre María, José quien sería su guardián, dos de los Reyes Magos llegados desde Oriente para traerle regalos al niño y animales del pesebre.
La mayoría de cristianos celebra la Navidad el 25 de diciembre, a pesar de que ningún texto sagrado aclara el día del nacimiento de Jesucristo. La festividad se fijó por dos vías que coincidieron en la misma fecha: por un lado, los cristianos adoptaron tradiciones paganas que ya se festejaban el 25 de diciembre y, por otro, las investigaciones eclesiásticas concluyeron que Jesús nació ese día. Aunque la Navidad es una celebración posterior a la Biblia, con los siglos se ha convertido en la festividad sagrada de los cristianos.
SINGIFICADO DEL NACIMIENTO DE JESÚS
La estructura del nacimiento simboliza la humildad y la riqueza de corazón. Se dice que aunque Jesús era el rey de los judíos, él eligió nacer en un sitio humilde para recordarnos que la felicidad no está en las cosas materiales, sino en nuestros valores y en el amor que mostramos por los demás.
Profetizado en el Antiguo Testamento y cumplido en el Nuevo Testamento. Aproximadamente setecientos años antes de Cristo, se registró una profecía acerca del nacimiento de Jesús en el Antiguo Testamento. Isaías 7:14 dice:
“El Señor mismo os dará señal: He aquí, la virgen concebirá y dará a luz un hijo, y llamará su nombre Emanuel”.
El Nuevo Testamento comienza con el relato del nacimiento de Jesús. En el primer capítulo de Mateo, el versículo 18 nos dice cómo se cumplió el nacimiento virginal profetizado en Isaías 7:14:
“El origen de Jesucristo fue así: Estando desposada María Su madre con José, antes que se juntasen, se halló que estaba encinta por obra del Espíritu Santo”. La nota 1 de este versículo en el Nuevo Testamento Versión Recobro habla del significado profundo de que María estuviera encinta por obra del Espíritu Santo:
“Aunque Cristo nació de María (v. 16), era hijo del Espíritu Santo. El nacimiento de Cristo procedió directamente del Espíritu Santo (v. 20). Su fuente fue el Espíritu Santo y Su elemento era divino. Por medio de la virgen María, Él se vistió de carne y sangre, la naturaleza humana, tomando la semejanza de la carne (Ro. 8:3), la semejanza de los hombres (Fil. 2:7)”.
Aunque Jesús nació como un niño con carne y sangre, Su fuente fue el Espíritu Santo. Mateo 1:20 nos dice más acerca del origen de Jesús: “Mientras consideraba esto, he aquí un ángel del Señor se le apareció en sueños y le dijo: José, hijo de David, no temas recibir a María tu mujer, porque lo engendrado en ella, del Espíritu Santo es”.
La nota 1 de este versículo explica: “Dios primero se engendró en María mediante Su Espíritu; una vez realizada la concepción, Él nació con la naturaleza humana, para ser un Dios-hombre, y así poseer tanto la divinidad como la humanidad. Éste es el origen de Cristo”.
Estos dos versículos, Mateo 1:18 y 20, nos muestran que el nacimiento de Jesucristo no fue de ninguna manera el nacimiento ordinario de un hombre ordinario; fue la extraordinaria encarnación de Dios mismo. El nacimiento de Jesús fue el nacimiento de un Dios-hombre, una Persona maravillosa que era tanto divina como humana.
JESÚS Y EMANUEL
Mateo 1:21-23 nos dice dos nombres de esta Persona preciosa y única, Jesús y Emanuel:
“Y dará a luz un hijo, y llamarás Su nombre Jesús, porque Él salvará a Su pueblo de sus pecados. Todo esto aconteció para que se cumpliese lo dicho por el Señor por medio del profeta, cuando dijo: ‘He aquí, una virgen estará encinta y dará a luz un hijo, y llamarán Su nombre Emanuel’ (que traducido es: Dios con nosotros)”.
Debido a la caída del hombre, todos los seres humanos necesitan un Salvador. Este Salvador es Jesús, quien es Jehová, Dios mismo. El Dios-hombre Jesús es el único que nos salva de nuestros pecados. Nosotros podemos disfrutar de Su salvación cuando invocamos el nombre de Jesús. ¡
Cuán precioso es el
nombre de Jesús!
¡FELIZ NAVIDAD!