Mientras muchos niños, niñas y adolescentes con sus equipos celulares propios van avanzando en el uso del celular y comprendiendo cada vez más el sistema virtual, muchos otros apenas pueden hacerlo cuando sus progenitores o tutores regresan del trabajo para prestarles su móvil, y otros tanto miles no pueden hacer nada porque no cuentan con el celular o el servicio de internet es malo o no existe.
Para estos últimos el retorno a la presencialidad por unas cuantas horas y días a la semana, es un estado al que esperan ocurra lo más pronto debido a que siente que poco o casi nada aprenden, tal como lo expresan los padres y madres de los estudiantes que se encuentran con estas limitaciones de la enseñanza virtual.
Así ante el anuncio del Ministerio de Educación que se iniciarán las clases de modo semipresencial se vienen dando opiniones diversas unas que están de acuerdo y otras que no. En el caso de nuestra región Loreto la dirección regional de Educación ha oficializado que el inicio de este tipo de clases se iniciará el lunes 20 de setiembre de 2021.
Se conoce que son 547 instituciones educativas que han sido habilitadas para este propósito, pero para que brinden el servicio educativo semipresencial deben ser declaradas aptas por el Ministerio de Educación y además deben presentar un Plan de Implementación aprobado por los directivos, padres y madres de familia, que integran la comunidad educativa.
Pero, hay posiciones contrarias irreconciliables, unos que dicen no por temor al contagio de la Covid-19 que sigue presente y amenazando con sus variantes y otros que sí por la falta de las herramientas tecnológicas, aunque se dan casos en las que teniendo, “no es lo mismo”, dicen madres de familia.
Esta coyuntura nos hace recordar que a inicios de la pandemia una fuente del Ministerio de Salud lanzó unas declaraciones poco creíbles en ese momento, cuando señaló que el coronavirus vino para quedarse con nosotros y no sabemos por cuánto tiempo, así que nos toca aprender a vivir con ella con la protección debida, sin paralizar nuestras actividades.
Luego vino todo el ataque de la Covid-19 en Iquitos y Loreto en general, con las miles de vidas perdidas, por lo que debemos considerarnos sobrevivientes de una guerra que no ha terminado, solo que ha bajado su ataque y en cualquier momento puede volver con nuevas armas (cepas) y darnos contagios mortales. Esa es la realidad.
¿Qué hacer entonces?, por razones explicadas por psicólogos y pedagogos, es mejor tener cerca momentos entre estudiantes y profesores, caso contrario el impacto emocional se reflejaría negativamente. ¿Y qué está pasando en el mundo?: Sucede que los niños van al colegio y si se presentan casos, entran a una etapa de cuarentena y evaluación médica, pasa el peligro y vuelven a las aulas, combinando tiempos de presencialidad y tiempos virtuales. ¿Será la nueva normalidad que no terminamos por acentar?
¿Esperada semipresencialidad?
