Habló el Dr. José Salinas Morales, en la ceremonia protocolar donde asumió el cargo como gerente regional de salud de Loreto.
Y era verdad. Nunca hay que olvidar la historia para que no vuelva a repetirse. Muchos recuerdan cuando el sector quedó a la deriva ya que el anterior gobernador dijo estar mal del estómago y se retiró a su casa, pero no le dejó el cargo al vicegobernador. También se vieron entrando cilindros de oxígeno en la casa de sus familiares, lo que indignó a la población.
El nuevo gerente (nacido en Juliaca) dijo que se había animado entrar al proyecto político de René Chávez, porque veía al sector salud que estaba siendo ninguneado, muy mal ya que el gobernador ni siquiera los recibía cuando lo buscaban. Y que ahora tiene la oportunidad de hacer algo por el gremio de salud, de “jalar agua para su molino”, lo que fue aplaudido por los trabajadores que se dieron cita a la ceremonia.
“En la época de pandemia hemos estado luchando por los pagos de jóvenes profesionales que estuvieron en la primera ola Covid, a quienes se les quería recortar el pago. Íbamos al gobierno regional y ni siquiera nos recibía el gobernador.
Yo decía como salud no podíamos estar tan mal. En la pandemia han hecho lo que querían, primero lo repartían, lo vendían y al final enviaban al hospital donde morían muchos pacientes cada minuto. Por eso me animé a participar en política.
Pienso que en cualquier gobierno basta que sea transparente, legal y que no robe, yo creo que hacemos mucho. Vamos a impulsar al sector, vamos a priorizar el primer nivel de atención, sin olvidar los hospitales.
Trabajar para abastecer a los 456 establecimientos de salud que hay en la periferia. Reconoceremos el trabajo de los promotores de salud, dándoles un bono por el trabajo silencioso que desarrollan”, dijo Salinas, agradeciendo el recibimiento y diciendo que esperaba no defraudar esa confianza.
PD. Sería importante que el gerente vea el tema de Datem del Marañón, de donde ayer nos enviaron pruebas de los despidos arbitrarios que vienen haciendo a trabajadores que cuentan con contrato indeterminado.