Credibilidad

Se podría decir que la credibilidad es una cualidad que hace falta que lo cultivemos con más profundidad y en estos tiempos se ha convertido en uno de los valores más importantes porque ante tanto aluvión de desinformación, principalmente en las redes sociales, el panorama se muestra muy confuso y eso hace mucho daño.
Sus consecuencias se ven reflejadas en diversas situaciones adversas de las sociedades actuales, nadie se puede excluir ni por vivir en ciudades o en el bosque porque la contaminación del descrédito, de la falta de confianza, se ha generalizado.
Por lo que nos queremos detener y transmitir fragmentos de un interesante mensaje que hizo el padre Raymundo Portelli, que la mayoría conoce, y que su trabajo pastoral contagia de forma positiva a católicos y no católicos, no es un hombre perfecto, y por supuesto que nadie lo es, pero, con sus obras nos brinda mucha confianza.
El padre Raymundo, ha logrado mucha credibilidad, así como otros sacerdotes católicos que están en su línea de solidaridad, e inclusive de otras religiones. En este caso, como es de conocimiento público sostiene con el apoyo de donaciones y actividades pro fondos, varias casas que apoyan a gente en abandono y son atendidos en lo básico para subsistir que ya es bastante.
Su desprendimiento lo lleva a invocar a través de un mensaje de que “Si queremos tener éxito en nuestros proyectos, si queremos tener un Iquitos, un Loreto, un país, un mundo mejor…”, la unión es la base sólida. “Podemos pensar diferente”, otra religión, otro color político, ideas filosóficas diferentes, opiniones distintas. La diversidad es bonita, pero en esa diversidad estar unidos. El espíritu de Dios es capaz de hacer eso”, dijo Raymundo.
Este mensaje recobra actualidad frente a las difíciles situaciones que afrontamos, pues se dio hace varios años. “Basta queridos, en vez de buscar lo que nos divide, busquemos lo que nos une”. Pidió ser justos y correctos, y hacer todo por amor, por servicio y sin estar preguntando qué beneficio se va tener.
Es obvio que se refiere a los ingresos adicionales producto de la corrupción, no del dinero ganado e invertido honradamente. Los puntos de coincidencia para el desarrollo sostenible y planes a largo plazo que se realicen obligadamente así se cambien las autoridades cada período, es lo que también necesitamos. Las obras y proyectos deben obedecer a un plan visionado y no a autoridades o grupos de poder de turnos.