Con palo en mano obreros de construcción evitan que vendedoras de comidas sean desalojadas por Maynas

Con palo en mano, obreros de Construcción Civil evitaron que la señoras que venden comida en las afueras de la obra del colegio emblemático Mariscal Cáceres, sean desalojadas de ese lugar por la municipalidad provincial de Maynas.

Como ya había sido anunciado, ayer al promediar las seis y media de la mañana, personal de la sub gerencia de comercialización de Maynas, en compañía del personal policial de la DUES, dieron cumplimiento a la ordenanza municipal que prohíbe la venta ambulatoria en la llamada zona monumental y en las veredas del distrito de Iquitos.

 

Las vivanderas de la avenida Mariscal Cáceres fueron las primeras en ser visitadas por los municipales, en un primer momento obligaban a la vendedoras a retirar sus puestos, indicando que ellas días atrás ya habían sido avisadas del cumplimiento de la ordenanza, pero igual las vendedoras se negaban a salir indicando que no tienen otro lugar dónde vender.

 

«Nosotros trabajamos de esta manera, no estamos haciendo nada de malo, el alcalde en época de campaña dijo que iba a poyar a la gente pobre, sin embargo está quitando el pan de la boca a nuestros hijos», indicó una de las vendedoras.

 

Las vivanderas pidieron a los funcionarios de Maynas que les permitan vender de seis a siete y media de la mañana, ya que esa es la hora en que llegan e ingresan a trabajar los obreros, quienes son sus principales clientes, pero pese al pedido los funcionarios indicaron que la ordenanza tenía que ser cumplida, esto generó el enfrentamiento entre municipales y obreros, quienes con palo en mano defendieron a las vivanderas.

 

Debido a esta situación el responsable de la sub gerencia de comercialización, decidió suspender la diligencia, indicando que hoy van a regresar para hacer cumplir la ordenanza. (G.Ross)