- Federación indígena suspende protestas de manera temporal y permitirá el libre tránsito.
La Federación de Comunidades Nativas del Río Marañón Saramuro (FECONARIMSA) anunció, mediante un comunicado oficial, una tregua temporal en sus medidas de protesta contra el Estado peruano. El documento N°004-2025, fechado el 18 de septiembre, precisa que la decisión busca facilitar la participación de sus dirigentes en una comisión de diálogo que se desarrollará en la ciudad de Lima.
El objetivo de este encuentro será abordar los puntos establecidos en su Plataforma de Plan de Lucha, que recoge las principales demandas de las comunidades originarias asentadas en la cuenca del Marañón. La federación sostiene que el diálogo es una oportunidad para lograr compromisos concretos que garanticen sus derechos colectivos.
FECONARIMSA aclaró que la tregua no significa el levantamiento definitivo de la medida de lucha. La organización mantiene su posición de continuar en pie de protesta, dependiendo de los resultados que se alcancen durante las conversaciones con las autoridades nacionales.
En el marco de esta tregua, las comunidades permitirán el libre tránsito de transportistas y embarcaciones en el río Marañón. Asimismo, se garantizó la continuidad de operaciones en la Estación 1 de Petroperú y en la base Batería 3 de Yanayacu, instalaciones que habían sido afectadas en días anteriores por las restricciones de movilización.
La federación remarcó que su movilización ha tenido siempre un carácter pacífico y responde a la defensa del bienestar y los derechos de los pueblos originarios. Bajo el lema “Arriba las comunidades nativas y campesinas”, recordaron que sus demandas apuntan a un trato justo y a la no vulneración de sus derechos fundamentales.
Este anuncio representa un paso importante hacia la resolución pacífica del conflicto, al abrir un canal de diálogo con el Gobierno central. La expectativa ahora está puesta en los acuerdos que se logren en Lima, los cuales serán determinantes para definir si las comunidades mantienen la tregua o retoman sus medidas de presión.
La mirada de las comunidades indígenas, así como de la opinión pública, se concentra en la capacidad del Estado para atender con seriedad las demandas históricas de la cuenca del Marañón. El proceso de diálogo será clave para construir confianza y dar señales de que es posible encontrar soluciones sin recurrir al enfrentamiento.





