Es justamente lo que nos falta, ser coherentes entre lo que decimos y hacemos. Y pasa a nivel personal como también institucional. Eso es lo que ha pedido Edwin Vásquez, vocero oficial de la Coordinadora de Organizaciones Indígenas de la Cuenca Amazónica, que acaba de llegar de Marruecos, donde participó en la COP 22.
El vocero oficial basa su pedido en que los presupuestos que llegan a favor de los indígenas, éstos no llegan, y se quedan en la burocracia de cada país. Este reclamo se hizo en esta importante reunión mundial por la contaminación del medioambiente que en varios casos afecta directamente a las poblaciones indígenas”.
Si bien es cierto que son los guardianes de nuestros bosques y tienen sus conocimientos ancestrales que han servido para conservar los recursos naturales por cientos y cientos de años, ellos no han merecido la atención de las autoridades de turno, por lo que han tenido que pasar varias décadas para que recién se valore su vida en armonía con la naturaleza.
Este y otros temas se abordaron en Marruecos, donde los representantes de todo el mundo están de acuerdo con que el cuidado del medioambiente es vital para todos. Y Edwin Vásquez comprobó que en estos eventos se plantean medidas muy efectivas, y realizables, para lo cual se establecen los fondos a utilizarse en ese objetivo. Es una caja millonaria.
Sabemos que desde hace un buen tiempo hay dinero flotando a la espera de la presentación de proyectos conservacionistas, y estos se presentan a través de los gobiernos de turno de cada país, pero, como dice el representante indígena, estos se quedan en la burocracia y no llega al objetivo final.
Es en esa parte donde queda al descubierto la incoherencia de las naciones que van a este tipo de eventos, entre lo que dicen y hacen. Mejor para ellos sino hay un control basado en resultados en los lugares de aplicación, pero este acercamiento de los guardianes del bosque hace cada vez más que no se saltee a los protagonistas y sea el respeto mutuo que lleve finalmente a lograr que las acciones que se implementen hagan posible el desarrollo de una economía indígena basada en la vida plena. Esto es importante para toda la humanidad en términos ambientales.





