Cerca de 30 personas de Belén habrían sido captadas por bandas vinculadas a la trata de personas

Temen por sus vidas. Hace aproximadamente un mes, cerca de treinta personas entre adultos y jóvenes, todos ellos varones, de comunidades como San Andrés, La Leva, Ocho de Diciembre y Nuevo Campeón, ubicados a orillas del río Itaya en la jurisdicción del distrito de Belén, fueron captados por un grupo de personas que aprovechando la extrema pobreza en que vive, donde el ingreso diario no supera los diez nuevos soles para alimentar a la familia, les ofrecieron pagar una fuerte suma de dinero de manera mensual sí es que aceptaban trabajar con ellos.

El ofrecimiento, según contó la hermana de uno de los jóvenes que aceptó el trabajo, cuyo nombre se mantiene en reserva para evitar represalias, debido a que logró escapar, era viajar a la ciudad de Pucallpa para luego herrumbrar hasta Huaraz, para trabajar en las granjas de la empresa «San Fernando» elaborando comida balanceada para aves.

 

«Mi hermano un día llegó a la casa feliz, porque le había ofrecido un buen trabajo con un buen sueldo, con la condición de que tenía que viajar a Huaraz para trabajar en la granja de San Fernando preparando comida para pollos, a nosotros nos pareció raro esta situación pero sin embargo mi hermano decidió viajar con otros chicos de acá», contó la hermana de uno de los jóvenes captados.

 

Al cabo de algunas semanas, este mismo joven que se mostró feliz por haber conseguido un buen trabajo, se comunicó con su familia vía telefónica, contándoles que los estaban maltratando, les prohibían hablar por teléfono y que incluso les habían quita sus DNI, motivo por el cual tomó la decisión de escaparse del lugar donde prácticamente los tenían en cautiverio.

 

«Mi hermano nos llamó ayer (miércoles) luego de casi un mes desde que se fue, cuando le preguntábamos cómo estaba nos decía que no podía hablar muchos, pero yo le notaba extraño, en un momento me dijo en voz baja que se estaba escapando y que iba a ir a Pucallpa por lo que me dijo que le avisara a un hermana que tengo allá para que lo esperara, luego colgó diciendo que me llamaría más tarde», narró la conversación la angustiada hermana.

 

Esta misma historia, se repite en otros jóvenes que al parecer lograron escapar del lugar donde les estaría explotando, según datos alcanzado por la esposa de una de las personas que también aceptó ir a trabajar en «San Fernando». Todos ellos estarían siendo obligados a cultivar hoja de coca en chacras que pertenecerían a grupos de narcotraficantes.

 

Debido a esta situación, ayer en horas de la mañana las hermanas, esposas y madres de tres de las personas que fueron llevadas a Huaraz, llegaron hasta la división de trata de personas de la policía nacional para denunciar este hecho; por su parte, los efectivos a cargo de esta división de investigación criminal, indicaron que van a esperar que lleguen de la ciudad de Pucallpa los familiares de las denunciantes para saber qué es lo que realmente a ocurrido en Huaraz. (G.Ross)