Por: Vanessa Roggeroni
Magister en Medioambiente y Desarrollo Sostenible
Docente de Maestría de la Universidad San Martín de Porres
Premio Nacional de Ciudadanía Ambiental 2010 -MINAM.
Este año 2024 más que en otros años se prendieron las alarmas ambientales esta vez en la Amazonía; los ojos de todo el mundo puestos en Sudamérica. El ecosistema más diverso del planeta lleva en sus entrañas una enorme serpiente de agua- el río Amazonas -que une a 8 países de Sudamérica y que está presentando un nivel muy bajo de su caudal resultado de la sequía histórica.
Brasil, Colombia y Perú suman el 83% del bosque amazónico y los otros países el restante 17 %; fuimos testigos de la deforestación y de los incendios forestales a través de los medios de comunicación. Lo que el ser humano está haciendo en contra de este ecosistema, atenta contra toda la humanidad porque pone en riesgo la mejor máquina extractora de dióxido de carbono de la atmósfera y ésta se encuentra en el bosque amazónico.
El llamado trapecio amazónico Colombia, Brasil y Perú en las últimas décadas ha perdido buena parte de sus bosques: Colombia el 56% de su bosque, Brasil 87,000 mil kilómetros de bosques, en Perú unas 100 hectáreas desaparecen cada mes; estas cifras a causa de la deforestación, la minería ilegal, la explotación ilegal de la madera, la ganadería, la agricultura expansiva; entre otros. El 60 % del territorio peruano son bosques tropicales y 277 mil hectáreas de ellos se ubican en Madre de Dios y para darnos una idea de la destrucción del bosque en Madre de Dios se calcula en 20 hectáreas por mes y para entender la magnitud del problema es comparar aproximadamente 20 canchas de futbol del estadio Max Augustín por mes.
¡Aún no nos damos cuenta lo que estamos perdiendo! Estamos perdiendo el planeta nuestra casa grande, la pérdida de bosques es pérdida de vida… el pulmón del mundo. El bosque es parte de un gran ecosistema ellos contribuyen a la RESILIENCIA del planeta para adaptarse con el cambio climático gracias a la biodiversidad. El bosque es la farmacia, es el mercado hasta la ferretería. Estamos perdiendo el agua dulce y es fuente de vida si nos quedamos sin agua la perderemos. Tú amigo lector seas autoridad o no y que te encuentras sentado leyendo este artículo ¿te vas a quedar con los brazos cruzados sabiendo que tenemos familia y que le estamos dejando un planeta moribundo? o ¿quieres sumarte a la acción y evitar que colapse?
La WWF Fondo Mundial para la Naturaleza organización gubernamental que se dedica a la conservación ambiental señala que si la amazonía rebasa el 20% de la deforestación alcanzará un punto de NO RETORNO porque ya no podrá regenerarse y sería el colapso de la selva.
Según las últimas investigaciones disponibles sin una acción urgente, el bosque tropical podría llegar a un punto de NO RETORNO, afectando directamente los medios de subsistencia de los 47 millones de personas que viven en la Amazonía, 511 grupos de pueblos indígenas, el 10% de la biodiversidad del planeta, y agravando las crisis mundiales del clima y la biodiversidad.
Este artículo de opinión sea un llamado a la ACCIÓN a las autoridades de la región Loreto Gerencia Regional Ambiental, Comisión Ambiental Regional (CAR-L) a la academia (universidades de la región), empresariado para implementar las políticas, planes de acción y las estrategias ambientales. Antes hemos escrito en estas páginas sobre la gestión ambiental, educación ambiental, responsabilidad social pero esta vez es un llamado a la acción por el clima, como dice el Objetivo de Desarrollo Sostenible ODS 13: ADOPTAR MEDIDAS URGENTES para combatir el cambio climático y sus efectos, pues todo lo que estamos viviendo es debido al cambio climático y por las malas prácticas del ser humano generando una gran cantidad de gases de efecto invernadero.
Todos tenemos que caminar hacia la conservación de la selva y sus habitantes tener una visión compartida. Lo que se hace por la selva en un país también repercute positiva o negativamente en otro país es un conjunto es un todo interdependiente.
En Perú el Ministerio del Ambiente a través del Instituto de Investigaciones de la Amazonía Peruana IIAP, está produciendo más de 25 millones de bolsitas reforestadoras para restaurar de manera masiva y rápida los bosques afectados por los incendios forestales y serán lanzadas desde drones y helicópteros y distribuidas en las zonas afectadas de San Martín, Loreto, Ucayali (Capirona, Bolaina, Topa) y en San Martín (Shaina) y Amazonas (Aliso). Estas bolsitas reforestadoras contiene Nitrógeno, semillas, abono, arcilla, cubierta de almidón y yuca. Primero iniciarán en San Martín y Amazonas y luego el proceso se replicará en Loreto y Ucayali.
En Brasil hay proyectos que cultivan especies amazónicas de la selva como plantas de Asaí y Andiroa para recuperar áreas deforestadas, hasta el momento han plantado más de 30 mil árboles en suelos definitivos. En Colombia-Leticia tienen un Centro de Rehabilitación para monos víctimas del tráfico ilegal de especies como el mono Churuco que son excelentes dispersores de semillas, por lo tanto, restauradores de bosques.
No podemos olvidar y considerar como aliados y aprender de los pueblos indígenas porque su cosmovisión de la naturaleza es como una madre que cría, que da vida y permite vivir. El fundador de la ONG GAIA de Colombia Martin Von Hildebrand dice: “… los indígenas de las comunidades son gente del futuro y no son gente del pasado de ellos debemos aprender; porque ellos son los guardianes del bosque y de la vida”.
Alertados estamos; sin una acción urgente, el Amazonas podría llegar a un punto de no retorno y ya no podremos hacer nada…aún podemos actuar y me sumo a la acción ¿alguien más?
