*Refirió el Psiquiatra Néstor Aguilar, del hospital regional de Loreto.
Por primera vez se le consultó al profesional de la salud mental sobre el tema de la corrupción en la psiquis de muchas autoridades o personas comunes y corrientes.
“Tendríamos que conocer que todos nosotros tenemos una parte de nuestra psiquis que se llama personalidad y que está formada por el carácter y el temperamento. El temperamento es lo que heredamos de nuestros padres. Son características psicológicas, que como las características físicas son heredables.
Podemos ser agresivos, violentos, pesimistas, aventureros, correr riesgos, por el temperamento de los padres y no se modifica. Se puede controlar, pero no modificar.
Y el carácter es lo que nosotros aprendemos desde que tenemos uso de razón frente a diversos acontecimientos, sucesos. Cada característica de la personalidad nace de la unión del temperamento con el carácter.
Pero volviendo al tema de la corrupción en aquellas personas que la aceptan de manera normal, puedo decir que es parte de nuestra personalidad. Algunos aceptamos la corrupción como algo normal, participamos en cuestiones de corrupción apoyando a los corruptos, entonces también somos corruptos.
Nosotros al apoyar esos puntos tenemos psicopatía, la enfermedad del alma, aceptamos como natural las malversaciones de fondos, la explotación indiscriminada de los recursos naturales con lo que estamos destruyendo el mundo y así, innumerables cosas más que tienen cuadro de psicopatía.
Para los corruptos, los que no entramos en corrupción somos los tontos, los zonzos por no aprovechar las circunstancias. Dicen, si todos están robando por qué yo no. Muchas veces me lo han dicho a mí, que soy tonto porque no aprovecho lo que todos los demás hacen.
Pero yo estoy feliz con mi conciencia, estoy en paz, nadie me puede acusar o denunciar. Vivo sin miedo a la fiscalía, al poder judicial. He obrado bien y espero morir sin haber entrado a esos temas de corrupción”, habló.
Y el nivel político que cada vez está peor ¿verdad?
-Exacto, parece que el que se presenta como el mayor delincuente, tiene más chance para ingresar al mundo político, ganar cualquier elección.
Y eso lo vemos a nivel nacional, regional, local, institucional. Las cosas están muy graves en el país, realmente da mucha vergüenza lo que estamos dejando a nuestros hijos, nietos.