-Actividad fue parte de los festejos por el 22 aniversario de dicha institución
Los casi 1,200 alumnos que estudian en el Instituto Reyna de las Américas, fueron protagonistas de una gran actividad que sirvió para demostrar que la belleza, el garbo, la creatividad y la alegría colectiva pueden ser ofrecidas abiertamente al público, que se deleita con este tipo de espectáculos, a su paso por las calles de nuestra ciudad cuyos habitantes estamos ávidos de disfrutar de espectáculos de calidad.
Jóvenes de uno y otro sexo, se esmeraron en lucir vistosos trajes de las diversas regiones del país, bailando rítmicamente a los compases de las más conocidas canciones del vasto repertorio musical peruano y bailando las danzas típicas de la costa, sierra y selva en un marco de alegría y entusiasmo por la celebración del 22 aniversario de su Instituto en el que aprenden enfermería técnica, secretariado ejecutivo, laboratorio clínico e informática.
Las bandas de músicos del Ejército, Marina de Guerra, Gobierno Regional y de la Institución educativa República de Venezuela amenizaron el colorido pasacalles donde se presentaron alegorías referentes a la mitología, costumbres y actividades propias del poblador de la selva, así como la presencia de señoritas disfrazadas de achiquinviejas, la tumba de la humisha, elaboración de fariña y masato, todo ello buscando revalorar las costumbres selváticas
El Director del mencionado Instituto , Lic. Federico Morey Lavajos, expresó su satisfacción por la masiva participación del estudiantado, la acogida entre la población y el correcto comportamiento de los alumnos que participaron de una sana competencia fraternal ya que el jurado calificador observó todos los detalles durante el recorrido, lo cual también mereció el palabras de agradecimiento por parte de la promotora Doillith Saldaña Marina
«Costumbres de la selva», representado por alumnos de laboratorio clínico, la delegación de enfermería turno de la mañana, con usos amazónicos y carnaval amazónico fueron las alegorías ganadoras haciéndose merecedores de premios en efectivo que fueron entregados inmediatamente después del pasacalle con lo cual se busca revalorar las costumbres de nuestra zona y no dejarse influenciar por representaciones foráneas.