Entre nuestra gente sobran los graciositos que les gusta aprovecharse de un hecho para sacar provecho “a la mala”, como es el caso de los productos nocivos que van a subir de precio debido al alza del Impuesto Selectivo al Consumo-ISC, pero ya los alharaqueros con segunda, están vociferando que “todo ha subido”, pero se tiene que medir las proporciones. Bueno, lo que sí todo está movido.
Los productos nocivos para los cuales se alzó el ISC son las gaseosas, los cigarros, la cerveza y los combustibles. Claro que este último producto arrastra a que se justifique el alza de una lista interminable de productos. Qué podemos hacer estando en la regla de juego del libre mercado, de la oferta y la demanda.
Hacemos un alto para referirnos al comentario estrictamente técnico del director del Banco Mundial (BM) para Perú, Bolivia, Chile, Ecuador y Venezuela, Alberto Rodríguez. Ha dicho que es una medida correcta y permite aumentar la recaudación.
“El alza de los impuestos es una medida que en su espíritu es absolutamente correcta. Además, se necesita aumentar la recaudación del país para mantener el balance fiscal y están atacando temas donde hay efectos en el consumo que son bastante negativos para el medio ambiente y la salud de las personas”. Así ha dicho en RPP.
Alberto Rodríguez destacó que se eleve este impuesto a productos como las bebidas azucaradas, el cigarrillo, el alcohol y la gasolina, pues en este último caso se trata de incentivar el uso de los vehículos eléctricos.
“Esas son cosas acertadas y por supuesto que tendrán un debate nacional importante, porque en estos temas siempre habrá ganadores y perdedores”, comentó.
El debate nacional ya está que arde. Y es que hay varias cosas sueltas. Por ejemplo dicen que se trata de incentivar el uso de los vehículos eléctricos, nos preguntamos cuántos vehículos eléctricos están exhibiéndose en las tiendas o están al alcance de los compradores. Parece que se adelantaron o están pensando en función de lo que hay en Lima u alguna otra ciudad del país, pero no es en toda la Nación.
En lo que sí estamos de acuerdo con el funcionario del Banco Mundial es cuando consideró que actualmente en el país se percibe un espíritu de diálogo y conversación del Gobierno con todos los sectores. Bien, pero las conversaciones no solo deben ser vacías, deben traducirse en directivas que sean las bases para el empuje en las regiones.
Para nosotros incluir en los productos nocivos a los combustibles, fue una jugada para un disimulado incremento de precios de los productos que el mismo mercado regulará, pero en un primer impacto serán los “graciositos” los primeros beneficiados. El debate seguirá y las especulaciones, también.