Escribe Héctor Minguillo Chanamé.
El 1 de mayo de todos los años se celebra en todo el mundo, el Día Internacional del Proletariado recordando la lucha de los obreros de la fábrica Mccormick de Chicago Estados Unidos, quiénes el 1 de mayo de 1886 decretaron una huelga general pidiendo como reivindicación principal las ocho horas de trabajo.
Esta huelga fue sangrientamente reprimida por la policía y después se enjuició y procesó a los dirigentes de esta justa lucha, a quienes se les recuerda como los Mártires de Chicago. Fueron encarcelados y otros ahorcados.
Cinco de ellos fueron sentenciados a muerte: George Engel, tipógrafo de nacionalidad alemana; Adolph Fischer, periodista de nacionalidad alemana; Albert Parsons, periodista de nacionalidad estadounidense; August Vincent Thedore Spies, periodista de nacionalidad alemana y Louis Lingg, carpintero de nacionalidad alemana, quien se suicidó en su celda para no ser ahorcado. Todos ellos eran de ideología anarquista.
A través de la historia podemos constatar el rol que juega la policía en defensa de los intereses económicos de quienes gobiernan un determinado país. En esa época en EEUU y en todo el lugar en donde se había desarrollado el capitalismo los obreros levantaron la bandera de las ocho horas de trabajo. Porque el capitalismo exigía 12, 14 hasta 16 horas de trabajo y el rol de la policía fue el de reprimir esta justa gesta de los obreros que tenían como bandera las ocho horas de trabajo; hoy en el siglo XXI vemos cómo actúa la policía en Loreto y el Perú, reprimiendo las justas luchas del pueblo.
LAS OCHO HORAS DE TRABAJO EN EL PERÚ
En el Perú en los años de 1900 se fueron gestando organizaciones de artesanos, después con la aparición del capitalismo en sindicatos de panaderos, hilanderos, zapateros, textiles y luego en federaciones, estas organizaciones tenían como bandera de lucha la reivindicación de la jornada de ocho horas de trabajo.
El Sindicato de Jornaleros de la Empresa del Muelle y Darsena y la Compañía de Vapores del Callao (Puerto) en enero de 1913, decretó una huelga general de sus afiliados y conquistó la jornada de ocho horas de trabajo, reivindicación lograda por primera vez en nuestro país. Esta lucha contó con el apoyo de nuestro pueblo y de las organizaciones sindicales y federaciones quienes se movilizaron por las calles del puerto del Callao. Esta, se conquistó siendo presidente de nuestro país el señor Guillermo Bilinghurst Angulo, quien decretó esta reivindicación en Ley.
La policía reprimió esta justa lucha y el primer mártir de esta justa lucha por la conquista de las ocho horas de trabajo en el Perú, es Florencio Aliaga, dirigente de los jornaleros del Muelle y Dársena, del Callao.
Los obreros organizados en sindicatos y federaciones prosiguieron en la lucha por lograr conquistar las ocho de trabajo para todos los obreros en nuestro país. Los obreros de Huacho fueron los segundos en lograr la jornada de las ocho horas de trabajo en el Perú en 1916.
Los jornaleros de las haciendas de caña en el norte, los de Huacho, los del Valle de Huaura y Sayán, los jornaleros del sur de nuestro país, los panaderos y los zapateros, carpinteros y los obreros textiles de Vitarte decretaron una huelga general teniendo como reivindicación principal las ocho horas de trabajo en enero de 1918.
Los obreros peruanos conquistaron el derecho a la jornada de ocho horas de trabajo en enero de 1918, siendo presidente el señor José Pardo y Barreda en su segundo gobierno.
Es necesario destacar que durante este proceso se fue incorporando todo el pueblo peruano y el rol de las damas fue importante sobre todo en el norte chico de nuestro país, como en Huacho, cuya influencia fue parte de esta conquista y el papel de la líder Manuela Chaflado, es parte de nuestra historia que nunca debemos de olvidar.
Los líderes de esta huelga general fueron: Manuel Caracciolo Lévano, Leopoldo Urmachea, Francisco Cabaña, Delfín Lévano entre otros.
Actualmente por la falta de comunicación y de capacitación de los obreros de las diferentes industrias por parte de sus dirigentes sindicales hoy los trabajadores son obligados a trabajar más horas, de lo que dice la conquista de las ocho horas que fue decretada por Ley en nuestro país.
PARO NACIONAL DE JULIO DE 1977
El Paro Nacional del 19 de Julio de 1977 tiene que ser recordado por todos los peruanos este 1 de mayo, porque es parte de nuestra historia.
Esta lucha fue dirigida por la Central de los Trabajadores de la Revolución Peruana-Lima. El Secretario General de esta Central era el señor Guzmán Rivera Castañeda, quien tuvo la responsabilidad de conducir esta lucha frente a la dictadura del General Francisco Morales Cerruti.
Guzmán Rivera y los dirigentes de esta Central iniciaron un diálogo con los dirigentes y bases de los Asentamientos Humanos, estudiantes, vendedores de mercados y sindicatos de base de otras centrales, a fin de garantizar el éxito de esta jornada de lucha en contra de esta dictadura que en alianza con las empresas venían maltratando a los obreros y trabajadores de diferentes gremios.
Esta coordinación fue a nivel nacional y se concretó con el Paro Nacional del 19 de Julio de 1977. La dictadura convocó a una Constituyente para el año 1978 y respondió políticamente con el despido de más de cinco mil obreros y empleados de las diferentes organizaciones participantes en esta lucha.