Por: Luís Roldán Ríos Córdova. rioscordova2101@hotmail.com
Hace algún tiempo escribí sobre Satanás y el infierno, preocupado por tanto feligrés que anda idiotizado en los templos detrás de curas o pastores tratando de alejarse de Satanás convencido de que es una amenaza permanente en su afán de agradar a Dios mañana, tarde y noche. Personas que agradecen incesantemente todo cuanto meten a la boca. Todas sus opiniones y decisiones son producto de la voluntad del señor, hasta cuando todo les va mal, es voluntad del Señor, es decir, llegan hasta a negarse a sí mismos como racionales.
En aquella ocasión opiné, como sigo opinando todavía, que Satanás no era otra cosa sino, el invento que más plata ha dado a las iglesias y por supuesto a los que viven de eso.
¿Quién trajo éstas ideas? En nuestro caso, España, quien en nombre de Cristo tuvo que usar las armas primero y luego el invento de Satanás y el infierno para consolidar el aplastamiento y dominio cultural que hasta nuestros días les viene sirviendo. Ojo. Sin el invento de Satanás y el infierno no habría sido posible someter a los pueblos, he ahí la complicidad de la Iglesia.
Resulta que encontré algunas opiniones del Holandés Varuch Spinoza, filósofo racionalista del siglo XVII acerca de la idea que él tenía de Dios y que se amolda a mis deducciones personales al respecto. Quiero compartir con aquellos que ya le deben tener harto al Señor. No le dejan descansar, todo el día le piden, le agradecen, le ruegan, le dice que le aman, le oran, aplauden, gritan en el templo, algunos cabecean las paredes, se arañan tratando de demostrar su odio a Satanás y su amor al Señor. El Señor por aquí, el Señor por allá…¡puñales! ya le tendrán cojudo.
Spinosa lanza su idea, su filosofía, para el que lo quiera tomar, yo cojo el diálogo y con su permiso lanzo como jugando a la frente de esos que se golpean el pecho todas las noches, cada domingo o sábado en los templos alabando al Señor, muchas veces sin saber lo que significa hacer un acto de bien más allá de su persona, admiro a aquellas que creyendo o no son agradecidos de Dios y lo demuestran no robando, no matando, no aprovechándose de la fe para vivir de eso, admiro a los que practican el bien como norma de familia, de los que son justos en sus actos sin someterse a los recaudadores que aprovechan el deseo que tiene el humano de un Dios para servirse de ellos y a las transnacionales eclesiásticas.
Spinoza para dar a conocer la opinión que tenía de Dios, construye un diálogo entre el Señor y un seguidor, diálogo al que yo, irreverentemente le hago un agregado que va en mayúsculas para su identificación y culpa correspondiente.
Dios le dice al fanático seguidor:
*.- Deja ya de estar rezando y dándote golpes en el pecho. Lo que quiero que hagas es que salgas al mundo a disfrutar de todo lo que he hecho para ti.
*.-¡Deja ya de ir a esos templos lúgubres, obscuros y fríos que tú mismo construiste y que dices que son mi casa. Mi casa está en las montañas, en los bosques, los ríos, LAS COCHAS, EN EL AIRE PURO. Ahí es donde vivo y ahí expreso mi amor por ti.
*.-Deja ya de culparme de tu vida miserable; yo nunca te dije que había nada mal en ti o que eras un pecador, o que tu sexualidad fuera algo malo. El sexo es un regalo que te he dado y con el que puedes expresar tu amor, tu éxtasis, tu alegría. Así que no me culpes a mí por todo lo que te han hecho creer. LO MALO NO ESTÁ EN USAR LO QUE TE HE DADO, LO MALO ESTÁ EN ABUSAR.
*.-Deja de estar leyendo supuestas escrituras sagradas que nada tienen que ver conmigo. ¡DE QUÉ SIRVE QUE LOS LEAS! Si no puedes leerme en un amanecer, en un paisaje, en la mirada de tus amigos, en los ojos de tus hijos…EN LOS OJOS DE UN NIÑO POBRE. Si no puedes leerme ahí. ¡No me encontrarás en ningún libro!
*.- Confía en mí y deja de pedirme. DEJA DE PEDIR LA MISMA COSA TODO EL DÍA Y TODOS LOS DÍAS. ESO NO ES FE. ¿Me vas a decir a mí cómo hacer mi trabajo?
*.-Deja de tenerme tanto miedo. Yo no te juzgo, ni me molesto, ni castigo. Yo soy puro amor. Deja de pedirme perdón, no hay nada qué perdonar. Si yo te hice…yo te llené de pasiones, de limitaciones, de placeres, de sentimientos, de necesidades, de incoherencias…de libre albedrío. ¿Cómo puedo culparte si respondes a algo que yo puse en ti? ¿Cómo puedo castigarte por ser como eres, si yo soy el que te hice? ¿Crees que podría yo crear un INFIERNO para castigar a todos mis hijos que se porten mal, por el resto de la eternidad? ¿Qué clase de Dios puede hacer eso?
*.-OLVÍDATE DE SATANÁS esas son artimañas para manipularte, para controlarte, que sólo crean sentimiento de culpa en ti Y CONFLICTOS EN TU CONCIENCIA. Respeta a tus semejantes y no hagas lo que no quieres para ti. Lo único que te pido es que pongas atención en tu vida. NO LA DILAPIDES.
*.-Amado mío, ésta vida no es una prueba, no es un paso en el camino, ni un ensayo, ni un paso hacia el paraíso. Esta vida es lo único que hay aquí y ahora y lo único que necesitas.
*.-Te he hecho absolutamente libre, no hay premios ni castigos, no hay pecados ni virtudes, nadie lleva un marcador, nadie lleva un registro. Eres absolutamente libre para crear en tu vida un cielo o un infierno.
*.-No te podría decir si hay algo después de ésta vida, pero te puedo dar un consejo. Vive como si no lo hubiera. Como si ésta fuera tu única oportunidad de disfrutar, de amar, de existir, DE HACER EL BIEN. Así, si no hay nada, pues habrás disfrutado de la oportunidad que te di. Y si lo hay, ten por seguro que no te voy a preguntar si te portaste bien o mal, te voy a preguntar ¿Te gustó?… ¿Te divertiste?… ¿Qué fue lo que más disfrutaste? ¿Qué aprendiste?
*.-Deja de creer en mí; creer es suponer, imaginar. Yo no quiero que creas en mí, quiero que me sientas en ti. Quiero que me sientas en ti cuando besas a tu amada (o), cuando vives para tus hijos, cuando acaricias a un animalito. QUIERO QUE ME SIENTAS CUANDO AYUDAS A UN NECESITADO, CUANDO CUIDAS Y PROTEGES LA VIDA.
*.-Deja de alabarme, ¿Qué clase de Dios ególatra crees que soy? NO SOY ALAN DAMIÁN. Me aburre que me alaben, me harta que me agradezcan. ¿Te sientes agradecido?
Demuéstramelo cuidando de ti, de tu salud, de tus relaciones, DE TU HOGAR, DE TU PRÓJIMO. AGRADÉCEME EXPRESANDO COMPRENSIÓN Y AMOR AL NECESITADO. Esa es la forma de alabarme.
*.-Deja de complicarte las cosas y de repetir como LORO lo que te han enseñado acerca de mí. Lo único seguro es que estás aquí, que estás vivo, que este mundo está lleno de maravillas. ¿Para qué necesitas más milagros? ¡TÚ ERES UN MILAGRO! ¿Para qué tantas explicaciones? No me busques afuera de ti, no me encontrarás, porque estoy dentro de ti.
Latiendo.
