¿Una educación con calidad y equidad?

Sí es posible lograrla en Loreto. Esto si es que en ese objetivo se comprometen las nuevas autoridades y llaman a su lado a un equipo técnico robustecido de conocimientos e idóneo que dedique sus horas de trabajo a confeccionar un plan integral de desarrollo educativo para la zona rural, indígena y de frontera.
Ayer el Dr. Jorge René Chávez Silvano, futuro alcalde de San Lorenzo, provincia de Datem del Marañón que abarca a seis distritos pobres de Loreto como: Manseriche, Barranca, Cahuapanas, Morona, Andoas y Pastaza; expresó una realidad absoluta en cuanto a lo que ocurre en aquellas comunidades lejanas al corazón de Iquitos.
“De acá (Iquitos) mandan a profesores  mestizos a las poblaciones indígenas, ni uno ni otro se entienden y así cómo se piensa mejorar el nivel educativo de las nuevas generaciones. Son problemas interculturales que hay que resolver cuanto antes, tienen que respetarnos para nosotros poder salir adelante y en eso vamos a trabajar”, subrayó el médico.
Es por ello que resulta rescatable y muy elevado el trabajo que siempre desarrolla UNICEF a favor de la niñez. En cuanto a la educación básica con equidad y calidad, vienen colaborando para articular enfoques y realidades en el marco intercultural y bilingüe porque los niños y niñas aprenden mejor en su propio idioma. Eso a no dudarlo.
Hoy, junto al Ministerio de Educación viene impulsando la formación de maestros, también en la producción de material educativo en seis lenguas peruanas. Así como en la ampliación de la cobertura de nivel inicial, la vigilancia social y la participación de los niños, niñas y adolescentes.
Según estadísticas recientes, se conoce que más de 1´000,000 de niños peruanos habla alguna de las 47 lenguas andinas y amazónicas, pero solo el 11,6% estudia en su propia lengua. ¿Entonces como queremos que esos niños escuchen, capten la información y la procesen para comprenderla en toda su dimensión? Es imposible.
Es como si a un adulto de un pueblo latino cualquiera, de frente le hablen en japonés, mandarín, etc. Entonces ahora se presenta una oportunidad fabulosa para que la nueva gestión regional irrumpa en las comunidades rurales e indígenas llevando a maestros bilingües que trasmitan conocimientos a las nuevas generaciones en su propio idioma. Generaciones que por ahora están rodeadas no solo de un atraso visible en sus comunidades, sino también de un atraso intelectual preocupante.
Eso se tiene que revertir cuanto antes.