“Sara ¿por qué estás llorando me voy a morir?”

  • Expresó el Dr. Rafael Changaray a su esposa Sara Shirley López Pinedo, pocos días antes de morir.


A lo que ella le respondió: “No amor no morirás, te prometo que voy a sacarte de acá, ahora están poniendo medicamentos fuertes y te harán una tomografía para ver cómo está la operación”.
Desde el año 2019 Sara era la esposa del Notario Rafael Changaray, quien muriera (2020) presuntamente por negligencia en la clínica “Emanuel” con los intestinos perforados, según necropsia. Ella narró ante la fiscalía cómo se fueron desenvolviendo los hechos día a día, antes de la muerte de Rafael.
“El día domingo 11 de octubre del 2020, despertamos aproximadamente las 10:00 de la mañana, desayunamos jugo y sándwich preparados en la casa, y como era costumbre salimos de paseo, ese día fuimos a Nauta, visitamos un restaurant llamado Campechano, almorzamos aproximadamente 14:00 de la tarde, fuimos acompañados por mis padres, un almuerzo tranquilo, comimos pescado sudado y tacacho; al terminar regresamos a Iquitos aproximadamente las 18:00 horas de la tarde, ya cansados nos duchamos y comenzamos a ver TV hasta quedarnos dormidos.
El lunes 12 de octubre del 2020:
El lunes 12 de octubre mi esposo amaneció con un ligero dolor en la parte abdominal, dirigiéndose ese día con dirección a su trabajo aproximadamente 8 am, y siendo así aproximadamente a las 11.30 de la mañana me llama a mi celular para comentarme que había conversado con su amigo Cristian Nizama, acerca del dolor que sentía, quien a su vez le había pedido que lo visite en el consultorio particular de Punchana, es así que mi esposo hace caso a esa recomendación del médico; en tal sentido ambos nos apersonamos a dicho lugar aproximadamente a las 12:00 horas del mediodía.
Cristian realiza una breve ilustración de la operación indicándonos que es simple, no invasiva y hasta indolora. Mi esposo almorzó sopa aquella tarde, luego después de la jornada laboral, aproximadamente a las 19:00 horas, mi esposo como de costumbre, me recogió de mi tienda, y me indicó que durante la tarde tuvo sensación de fiebre, por lo que le había vuelto a llamar a Cristian para que le vuelva a atender; en ese instante nos dirigimos al consultorio EMANUEL sede Punchana; al llegar al consultorio mi esposo le volvió a indicar el dolor ligero que sentía, y que por la tarde sintió fiebre; en ese instante Cristian dijo: le voy a llamar a Alex y tomamos la decisión para que se opere, diciéndole Cristian, si te opero, Alex entrara a la operación como mi ayudante… al pasar 15 minutos, llegó Alex Ponce (médico pediátrico) quien dijo que era viable la operación.
Siendo sarcásticos con sus comentarios “hoy te operamos, mañana descansas, miércoles ya estás bien y el fin de semana ya estarás comiendo makis”, es por ello que mi esposo confió ciegamente sin dudar un solo minuto y tomó la decisión apresurada de operarse.
Ya en casa como cada día, al llegar alimentó a sus gatos, estuvo con nuestros perros, nada hacía presagiar que ese día sería el último día de su atención a sus mascotas, y el primer día del inicio de una tragedia para nosotros. A las 22:00 horas llegamos a la clínica EMANUEL sede San Juan, de inmediato nos atendieron, allí se encontraba Cristian Nizama, Alex Ponce, quienes nos reiteraron, lo simple de la operación, debido a que yo, en cada instante, les preguntaba por los riesgos y complicaciones; recuerdo claramente que Cristian le tomó una foto a mi esposo al momento de medirle la presión, procediendo a enviarle al grupo de WhatsApp en común, indicando la “próxima víctima”.
Dia martes 13 de octubre del 2020
Culminó la operación a la 1.35 aproximadamente de la madrugada del día 13 octubre del 2020. Luego de algunos minutos ingresa a la habitación Cristian Nizama, a quien inmediatamente pregunte: ¿Cómo salió la operación? Él me miró asustado y preocupado, por unos segundos guardó silencio, y luego me dijo, que “Rafael es un caso especial” pues él tiene OBESIDAD INTRINSICA, con mi limitado conocimiento de medicina le pregunté qué quiere decir eso… explicó que mi esposo tenía los intestinos cubiertos de grasa, y que ellos lo habían sacado difícilmente, además no podían ni ingresar con los instrumentos laparoscópicos y señalándome que LiyanniI había grabado un video, y que le escriba a ella, para que me lo envíe al WhatssApp y vea como está Rafael por dentro.
En el acta de necropsia, aparecen varias perforaciones en los intestinos de mi esposo Rafael Edson Changaray Segura, que le causó la sepsis generalizada, causándole la muerte por motivo que no le hicieron la reoperación inmediata o una colostomía según indica la ciencia médica en estos casos de emergencia de peritonitis.
El médico Cristian le dio de alta a las 10:00 am de la mañana, o sea, en menos de 24 horas después de la operación, A PESAR QUE LE HABÍAN CAUSADO LA PERFORACIÓN DE LOS INTESTINOS. En casa mi esposo cumplió con lo ordenado por el médico, quien le dijo que debe caminar para que pueda recuperarse lo antes posible.
El día 13 de octubre en la noche comenzó a sentir los síntomas de dolor abdominal, fiebre, náuseas y vómitos, a pesar de haber tomado sus medicinas, procediendo a dormir casi ya de madrugada por el cansancio, dolor y fatiga.
Día miércoles 14 de octubre del 2020
Rafael se pone peor. La barriga se le había hinchado fuertemente.
Día jueves 15 de octubre del 2020
Ese día aproximadamente a las 12:00m del mediodía llegamos a la clínica, el médico verificó el estado real, de mi esposo quien presentaba: nauseas, fiebre, dolor abdominal e hinchazón de la barriga; ordenando Christian a su personal, que le realice exámenes de laboratorio, sin embargo estas personas, minimizaron su estado real de mi esposo, pretendiéndome hacer creer que estaba bien, me negaron los resultados. La hinchazón decía que era porque se había llenado de gases.
Día viernes 16 de octubre
Este día, seguía internado en la clínica, pero sin nada de mejoría, la hinchazón se hacía más fuerte, así como los dolores. Me dice que tiene un cuadro de dengue que era mejor que un infectólogo lo viera. Los exámenes según la historia clínica, había arrojado negativo para dengue.
El día 17 de octubre llegaron al extremo de mentirnos que mi esposo tenía Covid 19, confabulándose con sus amigos médicos de Esalud-Iquitos, lugar donde fue trasladado subrepticiamente, sin nuestro consentimiento. Esos señores estaban buscando la forma como tapar su delito con el covid 19, a fin de que mi esposo muera y justifiquen con el diagnóstico de covid 19, para evitar cualquier necropsia.
Cada vez su situación de salud de mi esposo, iba empeorándose, en la noche del día viernes 16 de octubre del 2020, a eso de las 20:00 horas, comenzó a faltarle el oxígeno, esto era porque la sepsis generalizada, ya había comenzado a atacar a los pulmones. Esa noche nos quedamos despiertos toda la noche y madrugada, mi esposo Rafael no podía dormir, se levantaba cada rato, caminaba y se sentaba, tenía la sensación de ir al baño y no podía orinar, me quedé con él y pude presenciar todo su sufrimiento.
Día sábado 17 de octubre 2020
Después de la transferencia a Essalud-Iquitos, les comencé a cuestionar a los médicos de la clínica Emanuel: Cristian Nizama, Alex Ponce y Liyanni Whittigahn, porque mi esposo no tenía seguro de Essalud, quienes me dijeron que me tranquilice, porque ya habían coordinado con el encargado de admisión. Pasaron unos minutos, casi a la media noche del día sábado 17 de octubre del 2020, se me acercó un médico con toda la indumentaria covid 19, me dijo usted es esposa del paciente Changaray yo le dije que sí, me pide mi DNI para firmar el acta de gravedad, cuando escucho esto de inmediato yo empecé a llorar, le dije doctor que está pasando y él no respondía nada. Luego dijo que estaba grave por una sepsis generalizada, no tenía dengue, ni covid 19 y que iba a necesitar un ventilador mecánico.
Entre aproximadamente a las 00:00 horas de la madrugada del 18 de octubre del 2020, y él estaba ahí en trauma shock en una cama dentro de una sala de 20 pacientes, estaba tapadito con una manta roja a cuadros, me acerco y estaba dormido y mi esposo pudo sentirme, se despertó y al verme con los ojos llorosos me dijo: ¿SARA POR QUÉ ESTÁS LLORANDO ME VOY A MORIR? Yo le dije no amor no morirás, te prometo que voy a sacarte de acá ahora están poniendo medicamentos fuertes y te harán una tomografía para ver cómo está la operación. Me contó que el médico Cristian, había ido y le dijo que el dengue más covid era mortal. Le dije que no tenía esos dos males. El médico Estebes ya no quiso atenderlo, indicando que no era asegurado.
Domingo 18 de octubre del 2020
Me acerqué a verle a mi esposo, lo vi más agitado, con la máscara de oxígeno, le cogí de las manos, estaban hinchadas, con varios moretones, por las constantes picaduras que le habían hecho, para sus exámenes, su abdomen totalmente hinchado, los puntos de la operación rojos y descociéndose, casi estirados, no se podía ni mover más que solo sus ojitos para verme, desconsoladamente me pidió que ore a Dios por su salud, él se sentía totalmente mal. Junté sus manos con las mías y oré por nosotros, sus lágrimas brotaron por sus ojos, recuerdo que me dijo: “Sari me van a volver a operar con corte, ya lo tengo claro me pondrán plaquetas, pero demoraré en recuperarme, organiza todo para que me den Licencia, yo soy un ganador voy a salir de esto victorioso, voy a luchar, tráeme un libro para leer”. Yo le daba aliento, le besé la frente y sentí su piel bien caliente, su rostro me mostraba que se encontraba con la fiebre volando.
Aproximadamente a las 14:00 horas de este día, llegaron Essalud Rafael Changaray Aguilar hijo de mi esposo y Nelida Changaray Segura hermana de mi esposo, les dije lo que estaba pasando y que haría que ellos puedan verle a mi esposo. Dada la sorpresa mi cuñada entra a trauma shock y ya no estaba mi esposo, pues antes de lo programado le había derivado a UCI, se había hecho realidad, lo tramado por el denunciado Alex Ponce, junto a mi cuñada sorprendidas nos dirigimos a Uci, y los médicos de Essalud lo habían asegurado las puertas, no pudiendo ingresar.
Aproximadamente las 18:00 horas recibo llamadas de un número desconocido, me envían un mensaje de texto, donde me dice que es una enfermera uci, y que mi esposo quería hablar conmigo. Yo devolví la llamada y mi esposo me habló diciéndome que se siente mal, que ya no quiere que le toquen las enfermeras, tiene miedo de morir, le dije que estoy afuera que estoy pidiendo que nos deriven a Lima, el mismo me pedía que quería salir de ahí. O sea, mi esposo ya se había dado cuenta de la muerte que le habían preparado los médicos de la Clinica Emanuel en complicidad de los médicos de Essalud.
El Dr. Sergio me indicó que seguía destarando y que si no lo entubaba sería mortal para mi esposo, para lo que accedí a que realicen dicho procedimiento. Refiriéndose que mi esposo estaba grave por sepsis y por la perforación que le habían hecho los médicos de la clínica Emanuel. Gracias a la doctora María Luisa Herrera Cheglio, decidieron. Aquella noche conseguimos donantes para tener las plaquetas, siendo una de ellas Milagros López, quien se quedó hasta las 4 de la madrugada.
Día Lunes 19 de octubre del 2020
La operación se realizó a las 10:00 de la mañana aproximadamente, posteriormente al promediar las 12:00 horas, salió el Dr. García Godos, indicando que la operación había sido un éxito, y que mi esposo tenía una perforación bien chiquita en el Yeyuno (otra mentira más, cuando lo real tenía varias perforaciones causada por los médicos de la clínica), y que debíamos esperar 3 días para que comience los movimientos intestinales, que sin embargo los siguientes días, no había ningún tipo de recuperación y más al contrario, él comenzaba a ponerse peor.
Al tercer día (23 de octubre del 2020) le vuelven a intervenir por tercera vez, debido a que uno de los drenes comenzó a expulsar un líquido “achocolatado” (materia o pus), le intervienen aproximadamente 12:00 del día, sin éxito, porque todo era muy tarde, la sepsis ya se había apoderado de todo sus organismos, por responsabilidad directa de los médicos de la Clínica Emanuel, que lo tuvieron seis días con mentiras y de los médicos de Essalud, quienes no lo intervinieron inmediatamente pese que conocían que estaba mi esposo con sepsis generalizada. De haberse reoperado, o realizado una colostomía se le hubiera salvado la vida a mi esposo.
Que, si no hubiera intervenido la fiscalía de prevención del delito y fiscalía de turno en varias oportunidades por requerimiento de mi cuñado Tony Changaray Segura, la muerte de mi esposo hubiera quedado en la impunidad, bajo la falsa del covid 19 tal y conforme lo habían planificado los denunciados” narró la viuda del Notario Changaray Segura. Hasta que la muerte le llegó de manera inevitable al joven profesional de leyes por lo que han interpuesto denuncia contra varios presuntamente responsables de negligencia.
(LMHL).