Portafolio de artista en la DRC»Gianfranco Annichini» creador del documental «Radio Belén»

-«La mirada de Annichini ha producido extraordinarios documentos fílmicos»

En la Dirección Regional de Cultura de Loreto se desarrollará el  portafolio de artista del reconocido cineasta Gianfranco Annichini, hoy viernes 09 a hora 7:30 p.m. EL cineasta compartirá con nosotros anécdotas y experiencias vividas  durante su larga trayectoria cinematográfica, uno de los trabajos  documentales más destacados de Gianfranco Annichini es «Radio Belén»,  cortometraje de 1983 cuyo relato se desarrolla en el conocido barrio  de Belén de la ciudad de Iquitos, nos habla de manera sencilla y  simple, sin aspavientos, ni artificios, de lo que representa dicha  radioemisora para esta localidad de la selva peruana.

Nacido en Italia, criado en Suiza y que se hace el sueco. Así deslinda  Gianfranco Annichini las dudas sobre su nacionalidad estética. 40 de  sus 60 años los ha vivido buena parte con el ojo clavado a la cámara.  La primera fue una bolex 16 mm.  que trajo de Europa junto a su cartón de diseñador gráfico. Pero no había venido para eso. Vino porque se  aburrió de Suecia -había dejado Suiza para proseguir sus estudios en  Estocolmo- y la sede sueca de los Traperos de Emaús invitaba a tierras  exóticas.

 

Era la India o el Perú. Gianfranco prefirió el segundo porque esperaba  encontrar la exuberancia natural y el clima templado del trópico.  Gianfranco ha mantenido a raya la pachotada (el humor está en los  motivos, a qué abusar de él), el contraste excesivo, los clisés y la  soberbia del artista que cree saberlo todo. En «María del desierto», fue la obsesión de la Reiche por unas líneas que ni el cineasta ni los  espectadores ni ella misma comprenden. En «Una novia» es el sueño de  un pobre viejo por casarse con una gringa (el Sr. Rázuri, mensajero en Inca Films), en «El hombre solo» es el aislamiento total de un  loretano en medio de la selva y los reproches de su mujer tullida, en  la espléndida «Radio Belén» no hay siquiera personajes, o sí, la Radio  del barrio fluvial de Belén.

 

En el montaje descubrí que la película tenía varios niveles, el  contraste del naturismo con la basura, el río que fluye, el  nacimiento, la vida y la muerte, y al final, el desconcierto del espectador ante el silencio. Gianfranco encontró en sus documentales  el trópico con el que soñó. El realizador usa la banda sonora como  base de edición con el fin de narrar  los diversos programas,  servicios, música y concursos ofrecidos por Radio Belén. Para ello, mezcla el sonido registrado en la cabina de trasmisión con el emitido por medio de los altoparlantes instalados en el poblado, tal cual lo  escuchan sus habitantes. (MIP)