¡No me quiten mi tierra! grita comunidad nativa yahuas

-Ubicada a orillas del río Momón.

-Piden a las autoridades que no permitan que ciudadano español les quite sus tierras.

-Empresario extranjero constantemente los hostiga.

-Presidente de Corte Superior de Justicia de Loreto y Defensora del Pueblo respaldan pedido de comunidad nativa.

«No me quiten mi tierra» es el llamado de desesperación que hoy grita la comunidad nativa yahuas, caserío Nueva Vida – río Momón. Vienen exigiendo a las autoridades que no permitan que un empresario español les despoje de lo más sagrado que tienen: La tierra que los vio nacer. Tierra que hoy es mezquinado por un ciudadano español que desde hace cuatro años  hostiga a los nativos Yahuas para que dejen sus territorios que durante años vienen habitando.

Según versión de los propios nativos, Daniel Rincón Prada es el ciudadano de nacionalidad española, quien desde el primer momento que ingreso a la cuenca del río Momón viene intentando desalojar a Yahuas de la zona argumentando tener título de propiedad otorgados por el área correspondiente de la Dirección Regional de Agricultura.

Henrry Sarin nativo Yahua afirma que este calvario cargado de sufrimientos se inició hace cuatro años y «no es posible que un extranjero venga de otro lugar a votarnos de nuestra casa, aquí hemos nacido, aquí vivimos; afirma enérgicamente quien demás precisa que su sufrimiento más grande es ver  a sus hijos y sobre todo a los niños quienes viven traumados por las amenazas» que reciben por parte del ciudadano español.

Por otro lado nos menciona «si nuestras leyes fuera como de Colombia u otros países aquí nosotros quizás mataríamos pero tampoco queremos eso porque si haríamos matanzas nos mandan a la cárcel y luego quien cuidaría de nuestros niños. Por eso ruego a Dios a que pronto se solucione este problema».

A simple vista podría parecer sólo un problema de demarcación de territorios pero el caso va más allá de eso, ya que Daniel Rincón Prada (ciudadano español) no deja tranquilo a los nativos Yahua tal como nos cuenta la señora Silvia Peña, quien con el rostro acongojado y los ojos llenos de lágrimas nos habla de su madre con quien vivió en alegría y armonía con la propia naturaleza y eso desea para con sus hijos.

Sin embargo este empresario no les permite tener tranquilidad y hace un llamado a las autoridades a que ayuden a solucionar este problema porque sus hijos y nietos viven asustados; por otro lado el curaca de la comunidad reafirma las versiones anteriores precisando que viven en problemas desde la llegada de este ciudadano español.

«Basta ya no queremos vivir de miedo, encogidos, queremos vivir en paz con nuestros vecinos quienes son nuestros hermanos». Afirma la autoridad nativa.

Este reclamo es solo uno de los muchos tiene los nativos Yahuas contra Daniel Rincón, quien según las mujeres nativas «es un ser  malo y perverso y eso se nota en el rostro, es tan malo que inclusive no permite ninguno de nuestros hermanos ingrese a cultivar el área donde están enterados nuestros antepasados (cementerio), el lugar está lleno de malezas, monte y no podemos ir a orar a nuestros muertos.

Pero las agresiones contra esta comunidad nativa ya han sobrepasado los límites cuando en el mes de mayo sufrieron la peor agresión, según nos cuenta Lenin Luna – Presidente de la Comunidad Nativa Yahuas – Nueva Vida río Momón; «fuimos atacados cuando dormíamos, eran aproximadamente las once de la noche todo estaba aparentemente en tranquilidad, cuando de un momento a otro los perros comenzaron a ladrar y de pronto aparecieron hombres cargados de gasolina comenzaron a rosear las casas, afirmando que si no salimos de este lugar pronto nos terminaran matando, quemando nuestras chozas.

Inclusive aquella noche derribaron la casa a la hermana Olinda quien estaba embarazada de cinco meses haciendo que ella se cayera de su emponado (casa) y esto hizo que ella abortara.

Años vivo aquí, este ciudadano español nos quiso matar para quedarse con nuestra tierra, ahora nos viene atormentando si cortamos un palito ya nos está denunciando y viene la policía, no quiere que cortemos nuestra leña nos mezquina, tanto así que ahora los turistas no vienen hacia nuestra lugar porque les ha prohibido a los botes que trasladen turistas hasta nuestra comunidad y esto nos causa un gran daño porque nadie compra nuestras artesanías y por ende no tenemos para comer. Puntualiza el presidente de la comunidad.

Definitivamente el llamado de los hermanos nativos Yaguas por una pronta tranquilidad para sus pueblos es unánime como esta por ejemplo… «Pedimos  que ese español se largue de aquí para así poder vivir tranquilo, basta que mis abuelos vivieron peleando y luchando en la época del caucho aquella vez entraban y derribaban nuestra naturaleza. Queremos salir adelante con toda nuestras familias, nos tratan como si fuéramos unos criminales delincuentes, somos nativos, tenemos hijos, quienes a veces se van sin desayunar, porque no tenemos ni un turista que llegue hasta nuestras comunidades.

«Que le hemos hecho a ese señor español para que nos trate así, no permite que toquemos un árbol para nuestra alimentación porque dice ser dueño de nuestro territorio» el pedido a las autoridades competentes es grande y deberían tomar en cuenta para dar una pronta solución a este problema.

Uno de los pedidos de los líderes de la comunidad Yaguas fue que el Presidente de la Corte Superior de Justicia de Loreto los visite y pueda corroborar in situ el sufrimiento y problema que viven, cosa que el Dr. Aldo Atarama Lonzoy no se hizo esperar y acudió lo más pronto posible quien efectivamente comprobó el estado de abandono en la que hoy se encuentra esta comunidad nativa.

Quien también asistió al llamado  fue la doctora Lizbeth Castro Rodríguez – representante de la Defensoría del Pueblo de Loreto, quienes escucharon atentamente los pedidos de los hermanos nativos Yahuas y se comprometieron a realizar las gestiones pertinentes para que ellos puedan volver a tener la tranquilidad que años atrás lo tenían.

Finalmente en nuestra Amazonía peruana existe una diversidad de culturas o comunidades nativas, algunas están muy lejanas a la ciudad de Iquitos que uno tarda días en llegar a ellas; y otras, están tan cerca que solo toma unos minutos visitarlos pero pareciera que estuvieran tan distantes para que estén tan olvidados por nuestras autoridades.

Hace tan solo unas semanas atrás nuestra ciudad estuvo en los ojos del mundo a raíz del reciente reconocimiento que ha recibido nuestro majestuoso Río Amazonas como una de las Siete Maravillas Naturales del Mundo. Acto que nos debe llevar a tomar conciencia sobre la importancia de preservar nuestro territorio y esto no solo se logra promoviendo el turismo, si no también respetando la vida y el derecho de los pueblos indígenas asentados en nuestra Amazonía peruana, tal como la Comunidad Nativa Yahuas – Nueva Vida – río Momón u otras comunidades. (Oficina de Imagen Institucional – CSJLO.)