«Mujeres sufren de muchos dolores al vientre pero no hay médico»

-Expresó que lo único que las aliviaba era la medicina natural

– También hizo un llamado al sector educación para que vea in situ la problemática.

Sabido es que pasados los 35 años -o antes- toda mujer empieza a registrar cambios que conllevan a la búsqueda de un médico, como son los ginecólogos, para tratar una u otra complicación. Eso en el plano de una provincia o distrito que cuenta mínimamente con un ecógrafo para los diagnósticos correspondientes.

 

Mas nadie llega al interior de las comunidades indígenas, donde muchas mujeres mueren de dolor y de falta de atención adecuada porque no cuentan con los profesionales, echando mano a la medicina tradicional que les alivia el mal por un tiempo. Sobre el tema se entrevistó a Rosa Nashnate Tapayuri, representante de la Mujer Indígena del Pastaza.

 

«Las mujeres la pasamos pésimo, las mujeres están olvidadas y no hay ni qué clase de apoyo, por eso estoy acá. No hay lo que llaman ginecólogo ni obstetra, las mujeres más sufren de infección urinaria, de dolor de vejiga, descensos, también hay tumores, pero no hay tratamiento para eso y se acude a la naturaleza. Estamos sufriendo con esos dolores al vientre, así la pasamos aguantando», contó Rosa.

 

En el tema educación también dio a conocer qué pasa por el Pastaza: «En el jardín la escuela está llena y hay una sola profesora y los niños no pueden aprender porque la profesora se dedica a cuidarlos y no tiene tiempo para enseñarles y eso es pésimo para los niños.

 

La nutrición es baja, debido a la contaminación del río ellos padecen enfermedades como diarrea, vómitos, andan mal del estómago y desnutridos. Hay un centro de salud pero no hay medicina, llevas a tu hijo al puesto de salud y no hay medicina, entonces es inútil irnos a la posta porque no se encuentra la solución», refirió Nashnate.