El tema del emprendimiento pasa por un elemento de motivación y respaldo a las iniciativas. Y esto se puede hacer realidad si las autoridades municipales distritales, provinciales y regional, prioricen esta base alimentaria para las familias y con posibilidades de pequeña comercialización.
El buscar el desarrollo a través del emprendimiento de las mujeres, devela una condición agraria de la mujer que ha permanecido oculta voluntaria o involuntariamente por una población masculina rural e indígena que tomaba la batuta en los proyectos a desarrollar con el apoyo del Estado.
Entendiendo el Estado representado por sus autoridades municipales y regionales son los llamados a prevenir situaciones críticas en las poblaciones respecto a, por ejemplo, la falta de capital para lograr una alimentación adecuada de los hijos y de los miembros de la casa en general.
Por ello es importante resaltar todo esfuerzo que apunte a desarrollar estos núcleos familiares que de lograr el éxito se verá reflejado en el progreso de los pueblos y en la disminución de la deserción escolar, de los actos reñidos con la sociedad, y otros que nos colocan en situaciones de violencia que se pueden prevenir.
Uno de los primeros pasos, en este sentido, viene dando la municipalidad provincial de Maynas cuando anuncia el respaldo a “Mujeres Emprendedoras”, que en la práctica son todas las que en sus comunidades vienen aportando al hogar con su esforzado trabajo.
En esa línea el lunes de la presente semana la comuna de Maynas ha entregado herramientas de trabajo como machetes, rastrillos, carretillas, etc., para la ejecución del programa social “Mujeres Emprendedoras” a las comunidades de “Rosario Aucayo”, “Gran Perú” y “Panguana I y II Zona” del distrito de Fernando Lores, y otras. Señalan que se trata de las primeras 500 familias.
Cada una de estas comunidades recibió semillas de culantro, nabo, rabanito, lechuga, rocoto, col, frejol chiclayo, repollo, pepino, col china, entre otras especies de hortalizas, todo esto en su primera etapa de ejecución del proyecto que desarrollan las mujeres en las huertas de sus propias casas.
Este proyecto es digno de imitar y ojalá se esforzaran en llegar a todos los hogares de las mujeres que deseen participar y no se quede solo en muestras de algunas, y miles se queden mirando en todo Loreto. Se espera que el Estado establezca líneas de emergencia para proyectos de vida a las municipalidades y gobiernos regionales, no como algo decorativo, sino como políticas de Estado que se cumplan, sí o sí. No queremos sobrevivir, queremos vivir.
Mujeres que emprenden
