Movido escenario

Desde hace varias semanas el escenario social se viene tornando cada día más movido, y hasta cierto punto preocupa la reacción desde las autoridades nacionales que no han hecho más que subestimar las medidas de protesta que vienen realizando diversos sectores de la empleocracia.
Esta actitud nos hace recordar cuando se minimizaba los efectos de la economía nacional respecto a la recesión, que en el mensaje a la Nación el presidente de la República tuvo que reconocer que no se lo miró en la magnitud de los efectos que luego se presentaron.
Vemos entonces que cada día se van sumando otros sectores a las protestas que siendo aisladas, van tomando una forma de masificarse como el caso de los médicos, a los que se sumaron las obstetras y las enfermeras se van alistando.
En el caso del magisterio, ya son varias regiones aparte del Cusco que están en huelga indefinida y que en Iquitos a inicio de la presente semana, un buen número de maestros denominados independientes, han formado un comité de lucha para sumarse a la paralización de sus colegas de otras regiones.
Una vez más preocupa que el sistema de prevención de conflictos no reaccione de manera debida, y en vez de encarar el tema bajo mecanismos dialogantes prefieren mirarlo de reojo y hasta señalar que no responde a reclamos reivindicativos, sino a motivaciones políticas.
En esto es importante hacer un alto para señalar que todo acto en la vida desde que nacemos es político, el tema es si nos referimos a actos de políticas partidarias o de ideologías que se anteponen a reclamos legítimos de los sectores laborales.
Si revisamos las listas de exigencias, en realidad se tornan en el tema económico de los sueldos de los trabajadores. Esto se plantea directamente en el caso de la Federación Médica cuando dice que no volverán a sus labores mientras no se acuerden montos concretos y con fechas de aplicación.
Es cierto que el país afronta una seria recesión, y si los gremios laborales se muestran intransigentes para comprender que de momento no se pueden dar aumentos sean mínimos o un poco más, eso no tendría que significar expresarse negativamente de las justas aspiraciones de los trabajadores.
Además, si en las negociaciones ya se hablan de montos y desembolsos paulatinos, lo que vienen exigiendo los representantes de los sindicatos es un cronograma de los desembolsos, que no es otra cosa que hacer las cosas bien, con eficiencia técnica, que se entiende caracteriza a este gobierno nacional.