Más tecnología agraria

La ruta de nuestro desarrollo dicen los entendidos deben apuntar al desarrollo agrario, forestal, turístico y la «ganadería» de nuestra selva baja que está en los ríos, lagos, cochas y quebradas, que abundan y no estamos dándole la gran atención que se merecen, entre otras razones, porque nuestra educación no se orienta a la explotación racional y sostenida de los recursos que nos ofrece la naturaleza, que es la gran riqueza que tenemos en el bosque.
En ese orden de cosas por desarrollar, el aporte de la Estación Experimental Agraria «San Roque» que es el organismo desconcentrado del Instituto Nacional de Innovacion Agraria-INIA en la Región Loreto, se encarga de promocionar los servicios y condiciones necesarias para complementarlas con las actividades de investigación y transferencia de tecnología e innovación tecnológica agraria.
El director de esta importante institución de Iquitos, ÍItalo Cardama Vásquez, se ha referido a esta Estación Experimental como que genera tecnologías en cultivos anuales alimenticios, tales  como arroz, maíz, frijol, caupí o chiclayo, yuca y plátano para garantizar la seguridad alimentaria de la población, así como en frutales tropicales amazónicos tales como el camu camu, pijuayo, ungurahui, copoazú, arazá, castaña, etc., con potencial de uso agroindustrial y posibilidades de exportación.
Esta institución como otras que investigan y cuyos resultados nos resultan favorables para el desarrollo, deben buscar estrategias que hagan que estos estudios se masifiquen y más que todo sean tomados en cuenta por las autoridades de turno, que parece están de espaldas a las importantes investigaciones que se realizan y cuyos resultados están disponibles.
Es que no forman cuadros técnicos que ausculten estos estudios y lo acoplen a sus planes de desarrollo como gobierno regional o local (provincial – distrital), y si lo hacen, el equipo técnico se queda frustrado porque para estas áreas nunca se generan presupuestos suficientes para el éxito de sus gestiones.
Es más, de no haber fondos se podría buscar aliados estratégicos a través de la cooperación local, nacional e internacional, en entidades que tienen oficinas en Iquitos, si no pueden ir más allá. Voces dicen que no interesa porque quizás no genera porcentajes monetarios de «marca corrupción». Así no se debe jugar. Por sus obras los conoceréis. Ojalá Semana Santa los lleve a una reflexión para acoger los logros en investigación como del INIA y otras entidades públicas y privadas.