Los que sobran…

Tanta algarabía juvenil, sobre todo adolescente, se vio por las calles de la ciudad de Iquitos que conforman los cuatro distritos: San Juan, Belén, Iquitos y Punchana. Una movilización que llamó mucho la atención. Cada sector con sus posibilidades, pero todos transmitían modo celebración.
Acaso es solamente algo espontáneo, temporal, un escape a muchos faltantes en la vida como el cariño, oportunidades, atención en diversas necesidades que nos embargó las ganas de tararear “El baile de los que sobran”, tanta juventud desahogándose con un buen pretexto de fechas festivas.
Dos formas de expresar por otro lugar con una fuerte protesta y por acá, sin querer queriendo, con el desenfreno de risas en el marco de actividades festivas, y donde no ha faltado el olor a marihuana en las inmediaciones de la Plaza Castilla, donde se están normalizando los olores característicos de esta droga.
Pensamos en los hijos de ustedes, en los nuestros, expuestos también a la tentación so pretexto de desahogo, de olvido que en esta sociedad hay tantas desigualdades que pisotean los derechos humanos y los derechos básicos que todo estado está obligado a cumplir.
El tema musical en mención de a mediados de la década de los 80, nos hizo cantar desde la profundidad de nuestro ser y actualmente vuelve a fluir cuando lo escuchamos en las voces de miles de jóvenes chilenos que gritaron por una serie de demandas ante su gobierno y lo lograron.
El integrante del grupo musical chileno “Los Prisioneros”, Jorge Gonzales, recordó con nostalgia y tristeza que esas letras todavía siguen vigentes a pesar que transcurrieron 33 años desde que fue un éxito: “Únanse al baile de los que sobran, nadie los va a echar de más, nadie los quiso ayudar de verdad”…
Y por nuestras calles iquiteñas y de Loreto en general también están “los que sobran” los que esperan una ayuda de verdad, oportunidades para continuar estudios, justicia para acceder a la meritocracia, financiamiento para cumplir con sueños y cómo no impulsar a los que demuestran que realmente sí lo desean. Tarea pendiente.