Imbuidos como estamos en la realización del próximo proceso electoral nacional, como que nos estamos olvidando de lo más importante en cada proceso, y es que a las citadas elecciones generales para elegir al nuevo presidente de la república, a los vicepresidentes, los congresistas y los representantes peruanos ante el Parlamento Andino. Se ha dado carta de representación a personajes cuya dimensión política colisiona con las reglas que rigen dicho proceso, lo que se entiende como una desnaturalización que debe ser enmendada por los organismos electorales que rigen el proceso.
Hace cuatro o cinco meses, olisqueando en las oficinas de la entidad que organiza dicho proceso, la ONPE, encontramos que hasta dicha fecha no había nombres que perfilaran la posibilidad de una candidatura que inquiete a los electores, pues no existía ninguna inscripción a la vista.
Sin duda tal reserva tiene un trasfondo que estaba dirigido por los mismos candidatos, para lograr un casi anonimato hasta la fecha clave para las inscripciones, lo que indudablemente no permitiría un examen adecuado a cada lista, para procurar una tacha que puede dar al tacho con algunos candidatos.
Así las cosas, tenemos como fecha inicial para las elecciones internas de los partidos políticos el 11 de noviembre del pasado año, ocurriendo el cierre de la inscripción de los candidatos a presidentes del 10 al 12 de enero y la instalación de las ODPE el 25 del mismo mes. Luego vino la fecha del cierre del registro de organizaciones políticas y el cierre de inscripciones de candidatos al Congreso que fue el 9 de febrero; mientras que el 24 del mismo mes se realiza el sorteo de miembros de mesa. Luego habrá un lapso de capacitación electoral que tendrá lugar del 01 de marzo al 08 de abril hasta dos días antes de las elecciones presidenciales que tendrá lugar el 10 de abril.
Repetimos, en este momento ya se sabe cuántos y quiénes se han presentado con la intención de llegar al sillón presidencial, aunque los escarceos que se ha sentido y se vienen sintiendo en el ámbito electoral, muestran algunos nombres que habrá que investigar, aunque algunos ya son supremamente conocidos en su personalidad y sus intenciones.
En este breve examen podríamos decir que la mayor chance, hipotéticamente en este momento la aporta Alejandro Toledo, relegando a un segundo lugar a la candidata de «Fuerza 211» y al tercero a Luis Castañeda Lossio, al cual por el hecho de mostrar una imagen envidiable además de un trabajo municipal positivo, le cayeron acusaciones múltiples, aunque todas fueron luego desechadas por inconsistentes y sin valor alguno.
Luego sus opositores, esos que sólo buscan dañar aunque el damnificado sea el país, criticaron y satanizaron el atraso en la puesta en marcha del metropolitano, aquí sí se notó la sucia maniobra que buscaba lograr una tragedia por no estar aún completos los trabajos y exigir una puesta en marcha que, sin duda alguna, habría manchado el nombre del «solidario».
Los demás candidatos, sólo merecen una breve descripción que no haría variar la ubicación que ahora ostentan respecto a los candidatos en la punta, de allí que de los otros candidatos pronto haremos un comentario, sólo con los que tendrían chance, vale decir Humala y PPK.