En la UGEL Ucayali – Contamana la situación es crítica e incierta, lo que ha generado que esta semana que termina se hayan producido una serie de protestas de los gremios magisteriales de la ciudad capital de la provincia.
La situación es crítica por la denuncia contra el ex director Miguel Mori Ríos, inmerso junto a también ex funcionarios en la grave acusación de robo sistemático, por lo que en la zona exigen se apliquen las sanciones administrativas y penales a la que hubiere lugar.
Además del proceso sancionador, exigen que se recupere el dinero robado, similar pedido que surgió en la UGEL Datem del Marañón de donde se extrajo sistemáticamente más de 6 millones de soles y por lo que más de una docena de ex funcionarios fueron procesados judicialmente.
Lo que ha pasado en la UGEL Datem del Marañón, parece que no ha sido suficiente para quienes llegan a administrar fondos del sector Educación en las provincias, y ahora la UGEL Contamana padece de lo mismo, lo que evidencia que la lección no fue aprendida.
El fin de semana de protestas en la ciudad de Contamana se resume en la clara exigencia de que de inmediato intervenga la auditoría, tras el corte presupuestal que hizo el recién encargado nuevo director, cuya ubicación jerárquica se debe definir con la emisión de la resolución directoral, la misma que urge por una serie de trámites que deben llevar firmas.
En cuanto a lo incierto hay otro punto preocupante para el magisterio en general de la UGEL Ucayali – Contamana, que es la insolvencia económica tras el robo sistemático detectado. Esto afectará el pago de sus remuneraciones en diciembre, mes hasta el cual ya no alcanzaría el presupuesto proyectado. Una intervención rápida podría ayudar a recuperar el dinero.
Lección no aprendida
