Electro Oriente detiene ejecución de pago de 100 millones al MEF

Gracias a las acciones legales presentadas por Electro Oriente se ha logrado detener la ejecución del laudo arbitral por el cual el Ministerio de Economía y Finanzas obliga a ELOR a pagar 100 millones de soles a favor del MEF. Así se evita recurrir al aumento de las tarifas o a la quiebra y posterior privatización de ELOR.
Parece raro que haya una demanda entre el MEF y ELOR, que es una empresa pública; pero sucede que el MEF reclama la inversión en proyectos de electrificación que se financiaron con fondos del FONAVI y se transfirieron a ELOR. Hasta allí parece lógico. Lo que no es lógico es que el MEF puso los precios sin atender los reclamos de ELOR, por la mala calidad de las obras que obligaron a inversiones adicionales de ELOR; por el cálculo desmesurado de intereses; y porque el MEF pretende cobrar incluso los aportes de los beneficiarios, gobiernos regionales, y locales; razón por la que fueron al arbitraje, que fue arbitrario al determinar que ELOR debe pagar 100 millones al MEF.
Ante ello, ELOR, aparte de oponerse a la ejecución del laudo promovido por el MEF en el proceso 19413-2018, también presentó una demanda de amparo para poder reclamar una revisión de las cuentas que no están claras, y así detener la cobranza de los 100 millones. Para ello, Electro Oriente, convocó a concurso la asesoría legal llegando a suscribir el contrato G-75-2019 con la consultora PMC SAC. En virtud a este contrato se presentó la demanda de amparo N° 05156-2019, de fecha 4 de setiembre del 2019 buscando revertir el mandato de pago de los 100 millones de Soles.
Ahora tanto la Gerencia General como el Directorio de ELOR, esperan se revise y se determine el valor real de las obras realizadas con el dinero aportado por el FONAVI, y se evite afectar a los usuarios de ELOR con un aumento en la tarifa; e incluso se diga que ELOR no es una empresa sostenible y facilitar así su privatización. En estas últimas semanas hemos visto cómo en Chile el encarecimiento de los servicios públicos ha ocasionado todo un clima de insatisfacción y protesta; que nos deja como lección, que ni el agua, ni los servicios eléctricos, ni otros servicios públicos deben ser monopolizados por empresas privadas.