Debate en debacle

En el contexto de una campaña electoral lo que los ciudadanos tenemos como uno de nuestros derechos, es conocer las propuestas de los candidatos al nivel de gobierno que postulan, lo que nos debe llevar a conocer más si sus intenciones tienen base en el marco de sus funciones en caso de llegar a ser autoridad.
Otro de los aspectos que debemos conocer bien los electores es la hoja de vida del candidato o candidata, qué ha hecho en su vida como ciudadano (a), en su trayectoria laboral, en lo que se ha desempeñado, cuál es su perfil en cuanto a su preparación para los trabajos que ha desarrollado y realiza, como ha ido creciendo en capacitaciones y cómo profesional.
Un punto importante es también el equipo técnico y político que le acompañará en caso de llegar a gobernar ¿quiénes son?, ¿por qué los ha elegido?, ¿en qué puestos claves se van a desempeñar de triunfar en las elecciones sobre los otros postulantes?, ¿cuál ha sido hasta la fecha el desempeño que han tenido como ciudadanos?
Aunque sea parte de la vida privada, en el caso de quienes aspiran a gobernar se debe conocer por lo menos si tienen antecedentes de violencia familiar u otras formas de violencia. Esto nos llevará a tener claridad sobre decisiones que pueda tomar respecto a políticas sobre familia, personas vulnerables y otros.
Son temas delicados que como sociedad tenemos también que evaluar antes de emitir el voto, ya que quién no es una buena persona en su vida familiar, así como en la sociedad, jamás será una buena autoridad. Es importante conocer los valores y principios de los postulantes, así como el compromiso social enmarcado en acciones positivas para la población.
Estos aspectos de los candidatos es lo que se espera conocer también a través de los debates que en uno de los últimos realizados parecía que estos eventos se han convertido en verdaderos: debacles, desde el objetivo que buscan, empezando por el respeto a las reglas de juego.
Es inconcebible que se quiere responsabilizar de inconductas a las llamadas “portátiles”, cuando es bien sabido que actúan conforme a lo coordinado con sus líderes desde sus bases de organización, que los inducen primero al juego de quién grita más, ello es más que evidente, luego viene el enfrentamiento verbal y hasta físico, dejando un reflejo negativo de lo que harían al ser gobierno. Estaremos atentos a cómo se desarrollarán otros debates.