Cultura pan de vida

La cultura nuestra de cada día que se promueve, pero falta más, mucho más. Si somos cada vez más sensibles al arte, si aumentamos nuestra capacidad de captar el sentimiento del uno hacia el otro, de la necesidad de hacer crecer la belleza del alma, iremos descubriendo que todo acto humano se vincula profundamente.
Desde la acción más simple hasta la más compleja tendrá un mejor sentido en la vida propia y en la comunitaria. Esto indefectiblemente se reflejará en nuestras relaciones humanas, en conexión con el mundo que nos rodea.
En lo cotidiano, todos los días acumulamos el estrés que luego lo depositamos en el otro sin la más mínima sensibilidad ni reparo de cuánto daño podríamos estar haciendo y por supuesto que esto regresa a nosotros de la forma más brutal.
Solamente observemos cuando nos desplazamos por las calles y vemos a todos en una carrera loca en las pistas de la ciudad, a sabiendas de que existe mucha gente conductora que no respeta las más mínimas reglas de tránsito.
Si con la sensibilidad que el palpar y apreciar el arte de la vida, nos da, hiciéramos el propósito de autocontrolar nuestro impulso y en vez de conducirnos a la ofensiva hacemos el esfuerzo de dirigirnos con la prudencia que las calles de la ciudad requieren ahora, muchos accidentes se evitarían.
El arte en su lenguaje silente y meditado, nos invita a cuidarnos y cuidar el entorno. En otras palabras te cuido y me cuidas, te cuidamos y nos cuidamos. El resultado sería que este pequeño mundo iquiteño tan alborotado que nos rodea disminuiría enormes tensiones, por lo menos en las pistas, o empezando por ellas, al conducir.
Y si partimos que todo acto es cultura, y que este nos debe ayudar a crecer como personas y no decrecer, también estaríamos dando pasos firmes en la construcción de una cultura del respeto mutuo que nos llevaría a relacionarnos mejor y vivir con mayor armonía.
Es el arte que también nos ayuda a encontrar ese equilibrio entre lo interno y lo externo. Es por ello muy importante que sea cultivado entre todas las edades y etapas de la vida, así como el aprendizaje, las expresiones artísticas o algunas de ellas, deben ser parte de nuestras actividades en el día a día. Cuan certero es que a mayor cultura, mejor sociedad.