Color valioso

Cuando se haya pasado la barrera de los 60 años es el momento en que más se acentúan las canas, ese color blanco de la cabellera tanto de hombres como de mujeres, ese color valioso que guarda mucha experiencia de vida personal, comunitaria y profesional.
Llegar a esa etapa puede empezar a producirnos temor, es que es el paso a un mundo más marcado por el paso de los años, pero si aprendemos a valorarlo y explotar su esencia, quizás sea el impulso más grande y al mismo tiempo la fortaleza ha ese tiempo por explorar, que será mejor con nuestro apoyo.
El Día del Adulto Mayor en el país se celebra mañana y tenemos que ponerlo en la agenda como una fecha especial porque en ella puede que ya estemos, y si no, pueden estar nuestros abuelitos, padres, familiares, profesores o vecinos que algún día vimos muy fuertes físicamente.
Que este 26 de agosto sea un buen motivo para en el marco del distanciamiento de 2 metros les digamos con cariño cómo valoramos su recorrido por la vida que puede ser de 65, 70, 75, 80 u 85 años, o más.
Y como se escuchaba decir hace unas décadas, no peinan canas por gusto, por supuesto que no. Decirles en este Día que les queremos escuchar y valorar su experiencia, que nos armaremos de paciencia y humildad para entender que algún día si Dios o la vida lo permite llegaremos hasta donde ellos y ellas han llegado, a ser adultos mayores, y que lo disfruten, que no se sientan menos, que tenemos mucho que aprender de ellos y que ellos también de nosotros, una combinación perfecta si la inteligencia nos da para valorarlo.
La legalidad actual en el Perú nos dice que las personas adultas mayores tienen derecho a vivir con seguridad, ser libres de cualquier forma de explotación maltrato físico o mental y recibir un trato digno, pues, seamos parte de ese gran grupo humano que valoran a los adultos mayores y les damos amor y paciencia, en ciertos casos, nada fácil, pero tampoco imposible.
La actuación judicial deberá ser particularmente expedita en casos en que se encuentre en riesgo de salud o la vida de las personas adultas mayores. Es una forma de protegerlos, que se debe traducir en amor y respeto hacia ellos y ellas que peinan hermosas cabelleras blancas y una historia de vida con muchas enseñanzas.