Candidatos, cuidado con el uso de bienes y recursos públicos

En un bien estructurado plan de fiscalización elaborado por la Contraloría General de la República, dicha entidad pondrá en juego diversos mecanismos de control para detectar qué autoridades que postulan por la reelección al cargo o los que lo hacen por primera vez, lo hacen utilizando recursos públicos o bienes asignados a la dependencia oficial donde laboran.

Tal forma de control se da en el marco del programa de prevención para el período electoral 2010-2011 y lleva por nombre «Postula con la Tuya» en abierta alusión a la ya manida  costumbre de antaño, de utilizar bienes del estado a favor de este tipo de certámenes de carácter político.

En una charla ofrecida ayer por la contraloría, la citada entidad ilustró a los hombres de prensa asistentes al acto, sobre el uso de bienes y recursos públicos para fines electorales, atención de denuncias, declaraciones juradas  de bienes y rentas, entre otros temas de importancia, que se dan antes y después de los comicios electorales. Además de  otros controles,  los mismos que se cumplirán mediante el programa «Apúntate  contra la Corrupción».

Dicha campaña advierte que está prohibido el uso de bienes y recursos públicos para fines de proselitismo, propaganda, publicidad o cualquier uso a favor de o contra candidatos, partidos, movimientos u opciones electorales para el presente período electoral; asimismo, señala que la sanción prevista por la normativa electoral, será la suspensión del ejercicio de las funciones del funcionario público, hasta una acusación de peculado, delito que es penado con ocho años de cárcel.

El gerente central anticorrupción de la Contraloría, Doctor Juan Carlos Requejo Alemán, declaró para nuestro diario y «Antena Política», que la presente campaña pretende contribuir, en el marco del control preventivo, con las autoridades responsables en materia de fiscalización electoral, enfatizando que todo funcionario público deberá utilizar los bienes y recursos del estado de manera adecuada y no para fines electorales o propósitos que no sean aquellos para los que hubieran sido específicamente destinados.